El concejal del Grupo Municipal Popular de Valdepeñas, Mario Antonio Ruiz, ha valorado este martes en rueda de prensa los datos del paro del mes de octubre en la localidad y ha pedido al alcalde de la ciudad, Jesús Martín, que use el superávit y el remanente de tesorería del Ayuntamiento, así como el dinero que no se ha gastado en las fiestas al no celebrarse por el coronavirus “en beneficio de los contribuyentes para que puedan vivir”.
En concreto, el edil ha pedido al regidor municipal que destine ese dinero a ayudar a pequeñas y medianas empresas, a autónomos, al comercio y la hostelería y a personas vulnerables. “No es el momento de poner más impuestos y de poner palos a las ruedas”.
Ha comentado que octubre cerró con 2.880 desempleados en Valdepeñas, siendo el 65% de ellos del sector servicios. “Es un dato preocupante. Deja claro que el ayuntamiento deja a su suerte a sectores como la hostelería y el comercio y no les da las ayudas que prometió”.
Ha criticado que el primer edil diga que hay superávit “a costa de que no se invierte el dinero en los ciudadanos”.
Ruiz también se ha referido al paro femenino, que llega a las 1.957 mujeres desempleadas en la ciudad. “Sus familias pierden poder adquisitivo. Hay que ayudar a las mujeres y no solo colgarse medallas el 8 de marzo. El paro femenino es otra pandemia en Valdepeñas”.
Ha dicho que el PP no ve que se haga una gestión eficaz en este sentido “porque o no les importa o no saben qué hacer”. “Es prioritario que las mujeres accedan al mercado laboral”. Ha apuntado que deberían llevarse a cabo acciones formativas y de emprendimiento.
Igualmente ha criticado la “falta de expectativas laborales que tienen los jóvenes en Valdepeñas”, que hacen que muchos tengan que irse a otras ciudades y al extranjero, así como el paro en personas mayores de 45 años, que tienen grandes dificultades de inserción laboral.
“Los parados no son un número, son personas con familias y con historias”.
Ruiz ha declarado que piden al alcalde que “deje de decir que hay superávit cuando no se ayuda a las personas. No queremos ser los más ricos del cementerio, sino que Valdepeñas no sea una ciudad muerta y paralizada, con los ciudadanos en las colas del hambre. Hay que invertir, no bastan las palabras”.