Once autores coordinados por Miguel Cortés Arrese intervienen en los dos tomos, organizados en quince capítulos, de ‘Arte en Castilla-La Mancha’ que acaba de publicar la editorial Almud y que este martes presentó en la Biblioteca Pública del Estado.
Estructurada de manera cronológica, la obra arranca en la prehistoria y llega hasta el gótico en la primera entrega y parte del Renacimiento para culminar en el arte de nuestros días en el segundo tomo, explicó Cortés Arrese, que indicó que se trata del primer estudio sobre el arte en el conjunto de la Comunidad Autónoma. Su labor como coordinador aseguró que ha sido “muy sencilla” ya que cada relevante período ha sido tratado por especialistas. “José Arturo Salgado escribe sobre el arte románico en torno al cual realizó su tesis; Sonia Morales centró su investigación en la escultura gótica y describe el arte de este período; y así en cada una de las etapas”, explicó Cortés, para quien esta obra, que se puede disfrutar como libro de lectura y ser utilizada también como libro de consulta, es una publicación “no ya de referencia, sino necesaria”.
El gótico y el arte contemporáneo y de nuestros días son los apartados en los que artísticamente Castilla-La Mancha destaca, algo que también sucede en la provincia de Ciudad Real, apreció el coordinador de una obra que se detiene en las singularidades correspondientes a los parques arqueológicos y la producción artística de El Greco. Es una obra “útil” no sólo para los estudiantes de arte, sino para cualquiera que quiera tener una “muy buena síntesis de la historia del arte” en el territorio castellano-manchego, agregó Alfonso González-Calero, responsable de Almud, que resaltó que esta publicación refleja la revalorización del patrimonio y el arte de la región, describiendo lo más relevante en pintura, escultura y arquitectura, al tiempo que incorpora otras disciplinas artísticas del último tramo del recorrido como fotografía y cine.
José Rivero ha sido el encargado del ‘arte actual’ de los siglos XX y XXI, en los que hay “enormes singularidades pictóricas”, de peso a nivel nacional, como Alberto Sánchez, Gabriel García Maroto, Benjamín Palencia y Gregorio Prieto, a los que hay que añadir relevantes creadores como Antonio López García. Rivero consideró muy positivos esfuerzos como los de este libro en favor de reivindicar “espacios propios” en una Comunidad Autónoma en la que por motivos históricos hay un carácter híbrido con provincias como la de Albacete con una larga vinculación por ejemplo con Murcia, a lo que se suma la atracción que han ejercido grandes urbes como Madrid para el conjunto de Castilla-La Mancha y Valencia para la parte más oriental de la región.
Los dos tomos publicados por Almud suponen, así mismo, una significativa actualización desde una perspectiva regional a estudios que se dedicaban a una única época o provincia, estimó Rivero, que ha incluido en su capítulo de cierre del recorrido por el ‘Arte en Castilla-La Mancha’ el cine, la fotografía, el diseño y la poesía visual, a los que se podrían incorporar, en una futura revisión de la obra, otros campos como los de la ilustración o la cerámica.
Además de Salgado, Morales, Rivero y el propio Cortés, la obra cuenta con la participación de Silvia García Alcázar, Antonio de Juan, Rosario Cebrián, Laura María Gómez García, Pedro Miguel Ibáñez Martínez, Fernando González Moreno y Adolfo de Mingo Lorente.