Apenas lleva año y medio dedicado a la modalidad de Salvamento y Socorrismo, pero Pau Beltrán ya está entre los mejores de España. Varias medallas conseguidas en el campeonato nacional le llevaron a ser convocado por la selección española para competir en el Europeo, celebrado la pasada semana en Castellón y en donde estuvo en algunas pruebas cerquísima de conseguir colgarse algún metal con hasta cinco cuartos puestos.
“Me quedó esa espinita clavada por no haber podido conseguir alguna medalla por tan poco, pero la verdad es que acabé muy contento. Era mi primer Europeo y pude bajar mis marcas y hacer muy buenas posiciones”, cuenta Pau Beltrán, que es presidente, monitor y nadador del CN Alarcos Ciudad Real, si bien, en esta modalidad defiende al Club Alcarreño al no contar con ella el club ciudarrealeño.
Beltrán nadó hasta 16 pruebas de piscina en apenas tres días, además de una más de playa, en la que, lógicamente, no puede entrenar en Ciudad Real: “Ni la toco”, dice. Un enorme esfuerzo que contó con unos buenos resultados: fue cuarto individual en 100 metros combinada y en 50 arrastre de maniquí, más cuarto en el relevo 4×25 arrastre de maniquí, 4×50 obstáculos y 4×50 mixto, con récord de España. Además, fue quinto en el relevo 4×50 combinado, quinto en 4×50 tubo de rescate en playa, sexto en el rescate con cuerda y en el 4×25 remolque de maniquí, séptimo en el 50 remolque de maniquí y noveno en el 200 obstáculos, ganando la final B.
Su aportación contribuyó al cuarto puesto del equipo español en el Campeonato de Europa, al que reconoce que llegó “algo deshubicado. Era la primera vez que iba con la selección, pero allí había un ambiente muy bueno. Estuvimos una semana antes entrenando y me encontré muy a gusto”, comenta.
Pau Beltrán seguirá dedicado al Salvamento y Socorrismo de cara a la próxima temporada, en la que tendrá dos objetivos muy claros para clasifcarse: los World Games, competición para los deportes no olímpicos en el mes de julio que será en Estados Unidos, y el Campeonato del Mundo, con sede en Italia en el mes de septiembre. “Ojalá pueda clasificarme para los dos”, sentencia un nadador que ha disfrutado a lo grande en todo un Europeo, pese a esa espinita clavada.
