El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, avanzó este martes la puesta en marcha de un Plan de Empleo para mujeres rurales, con prioridad absoluta para las víctimas de violencia de género, dotado de cinco millones de euros, que se pondrá en marcha antes de que finalice el año y que facilitará la inserción laboral de un millar de mujeres. “Entendemos que el empleo y la seguridad económica son un pilar esencial para las mujeres que sufren la violencia de género y también para aquellas que viven en un entorno rural”, señaló.
El jefe del Ejecutivo autonómico hizo estas declaraciones en rueda de prensa junto al presidente de la comunidad de Aragón, Javier Lambán, tras el encuentro celebrado entre ambas administraciones para tratar la situación de despoblación que sufren las dos regiones, así como la reforma de la financiación autonómica. Precisamente uno de los daños colaterales de la despoblación es el proceso de masculinización de ciertos territorios que se produce, principalmente, por la falta de oportunidades que sufren las mujeres en el medio rural.
“Queremos oportunidades equiparables a las de la España del litoral”, dijo el presidente castellano-manchego, al tiempo que reivindicó una reforma financiera autonómica que tenga en cuenta que no cuesta lo mismo prestar servicios básicos en la España despoblada que en una gran ciudad. “No puede haber una España avanzada y otra bucólica”, rubricó.
El jefe del Ejecutivo castellano-manchego subrayó asimismo que ni Aragón, ni Castilla-La Mancha “piden dinero para intérpretes oficiales” ya que “el 94 por ciento del gasto público tiene que ver con las prestaciones públicas que ofrecen las comunidades autónomas, unas partidas que a todas luces son objetivables”.
Se trata, en opinión de García-Page, de un concepto claro como es la igualdad de oportunidades en prestaciones sociales, sanitarias y educativas, ya que si no fuera así se estaría poniendo en riesgo el Estado del bienestar, dado que se está cargando a las comunidades autónomas con las obligaciones que debe tener el Estado. “Confiamos en que antes de que acabe el año se dé solución a los pagos pendientes que nos están llevando al estrangulamiento financiero”, matizó.
En este orden de cosas y tras reiterar que los gastos se deben valorar con un criterio de igualdad de oportunidades, explicó que el reto de la despoblación es un problema estructural y eso conlleva tomar decisiones propias que deben estar respaldadas por un sistema financiero equitativo en todo el país.
Tanto García-Page como Lambán mostraron su confianza en que habrá una solución para las entregas a cuenta antes de final de año, ya que tienen la palabra de la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, de que así suceda.
Tercera comunidad autónoma de España en extensión
Castilla-La Mancha es la tercera comunidad autónoma de España en extensión, si bien ocupa el noveno lugar en cuanto a población se refiere, siendo la última región del país en densidad de población (25,51 habitantes por kilómetro cuadrado), seguida muy de cerca por Castilla y León (25,57 habitantes por km2), Extremadura (25,77 habitantes por km2) y Aragón (27,43 habitantes por km2), evidenciando la dispersión demográfica de la España interior.
