La comida como referente
Migrar es para siempre es un proyecto que desarrolló un trabajo con seis personas migrantes que solicitaron asilo al país y que trabajaban en los comedores del CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado). A través de ellos se pudieron oír voces diferentes que narraban el trauma y los duelos que acompañan estos desplazamientos,
Sus escritos contando sus experiencias suponían una nueva visión del proceso personal que cada uno había experimentado dando un nuevo sentido a palabras como asilo, refugiado y migración. Los relatos se hicieron realidad compartiendo comidas, discutiendo, dialogando y tratando de entender su experiencia. A partir de esta convivencia se seleccionaron una serie de frases que serían la base del proyecto visual del trabajo realizado.
Desde marzo de 2022 se desarrolló un trabajo para conocer los relatos ocultos y complejos del fenómeno de la migración en España. Cinco personas trabajadores de la empresa de inserción CAUSA que son cocineros en los centros de Madrid de CEAR contaron su historia personal, su experiencia. Cinco voces distintas a través de las cuales repensar el significado de la migración. Sus historia permiten reflexionar sobre la cicatriz que deja el trauma y los duelos que acompañan el desplazamiento. Cada uno de ellos escribía su historia como herramienta para conocer relatos. La cocina y las recetas fueron los pretextos para establecer la relación personal.
Cada uno de ellos cocinaba un plato que tenía una significación especial que le traía recuerdos y les unía con su origen, Y a partir de ahí la posibilidad de conectar, de escuchar sus experiencias y compartir sus vivencias.
La tarjeta roja
La tarjeta roja es el documento que se concede a todas aquellas personas procedentes de una región en conflicto o que han sufrido un desastre natural mediante el cual se les autoriza a vivir en territorio español. Así, esta persona que se encuentra en un país que ha sufrido alguna de estas situaciones adversas, pueden venir a España y solicitar la residencia por razones humanitarias o ser refugiado y pedir asilo político.
Es lo que se denomina protección internacional. De aquí que el nombre oficial sea documento acreditativo de la condición de solicitante en tramitación de protección internacional. No obstante, la tarjeta roja no es una tarjeta que concedan una vez aprueban el asilo. Ésta será entregada cuando la solicitud de asilo del extranjero se admite a trámite. Es decir, es el documento que se entrega a los solicitantes de asilo político y que les permite residir en España mientras se procesa dicha solicitud.
Recibe el nombre de tarjeta roja ya que está impresa en una cartulina de ese mismo color. Permite trabajar, pero sólo con la segunda tarjeta que recibe una vez renovada. Un contrato de trabajo a largo plazo o el alquiler de viviendas son casi imposibles de conseguir con ese documento. La tarjeta debe renovarse cada seis meses y puede ser concedida la renovación o no, siendo así motivo continuo de incertidumbre.
El proyecto se realizaba con personas que habían experimentado este proceso. A partir de la experiencia de la cocina con las cinco personas que participaban en el proyecto se seleccionaron un conjunto de frases más específicas, capaces de generar carteles publicitarios e instalaciones luminosas que iban a ocupar diferentes espacios públicos en la ciudad de Madrid. Humberto, de Venezuela, Lionel, de Camerún, Lisbeth de Venezuela, Consuelo de Guinea Ecuatorial, Liliane de Camerún y Brayan de Colombia son los protagonistas del proyecto
Arte urbano no destructor
La actuación se completaba con un conjunto de intervenciones en diferentes entornos urbanas con la proyección de frases especialmente significativas referentes al proceso de la migración.
El libro Migrar es para siempre recoge los testimonios de las cinco personas que trabajan en los Centros CEAR con fotografías de la actuación realizada en diferentes lugares de Madrid. Una publicación con un excelente grafismo que utiliza intensivamente el color rojo en sus páginas como recuerdo de la tarjeta roja con los textos de cada una de las personas. La revista “Dramática”, del INAEM del Ministerio de Cultura se hace eco del proyecto con un amplio artículo titulado Ensayos para una disrupción del espacio.
Las acciones de intervención realizadas son ensayos que han buscado disrumpir los espacios destinados tanto a publicidad como a la mirada cotidiana frente al diseño urbano. Anuncios en soportes de edificios cotidianos de la ciudad, pero con contenidos que rompían aquello que los ciudadanos esperaban oír y ver. Se utilizaron intervenciones de luz, proyecciones con rayo láser que permitían presentar mensajes de grandes dimensiones en espacios en los que no se esperaba ver. Los jardines del Descubrimiento en la plaza de Colón, la Plaza Elíptica de Usera o el Ministerio de Trabajo fueron algunos de los lugares elegidos. Edificios y espacios con una clara significación para la ciudad.
Los espacios seleccionados tenían alguna relación con el proceso de la migración: el parque de Pradolongo espacio de reunión y esparcimiento de migrantes asiáticos y sudamericanos,, el Ministerio de Trabajo, las oficinas de Pradillo donde se realiza el trámite de renovación de la tarjeta roja…Y, en esos espacios, hasta doce, aparecían los nuevos mensajes: Migrar es para siempre, Tengo rabia por migrar y tener que dejarlo todo, La tarjeta roja es comida para hoy, hambre para mañana, Hay derechos humanos para blancos y hay derechos humanos para negros… eran algunos de los rótulos que la luz dibujaba en los edificios y de los que la imagen fotográfica dejó constancia.
Un proyecto que ha recogido, de primera mano, la experiencia de la migración en España y la ha querido hacerla visible a través de esta intervención artística que queda documentada en la publicación Migrar es para siempre y en el artículo de la revista Dramática. Una buena forma de sensibilizar a todos de una realidad de especial importancia en nuestro país.