La exposición, comisariada por los fotógrafos Francisco Zamora y el galerista Mariano Rivero, ha sido inaugurada por la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Piedrabuena, Isabel Herrera.
La muestra está compuesta por veinticuatro fotografías que, de forma muy escueta, aporta una visión de lo que están haciendo o han hecho estos doce participantes, alguna de ellas, realizadas por primera vez con teléfonos móviles, han explicado los comisarios de la muestra.
El hecho de que, por primera vez, hayan participado doce fotógrafos, que haya dos jóvenes y que también hayan aportado sus fotografías cuatro mujeres, han sido un motivo de satisfacción para los organizadores.
En las dos docenas de fotografías se pueden ver retratos, autorretratos, desnudo, paisajes, puestas de sol, fotografía de bodas con un toque personal, algunas naturalezas muertas o superficies planas.
Hay tanto blanco y negro como color y fotografías analógicas reveladas y positivadas por alguno de los autores.
Entre los fotógrafos que participan en esta muestra se encuentran Mariano Rivero, Pura Camarena, Aníbal de la Beldad, Antonio del Hierro Laín, Antonio González Albalate, Kiko Comino, Begoña de la Cruz Merino, Margo Zúñiga, Ángel Navas Becerro, Félix Ortega Freire, Andrea Rivero Enríquez y el propio comisario de la muestra, Francisco Zamora.
El propio Francisco Zamora ha explicado que Mariano Rivero presenta dos imágenes en las que capta el paisaje en movimiento en blanco y negro y hechas con un móvil.
Pura Camarena aporta su visión del río Bullaque, una fotografía que muestra un paraje con una nitidez extraordinaria mientras que en la otra se decanta por ese ambiente del atardecer, con cierta neblina muy tenue que crea un ambiente de gran belleza.
Aníbal de la Beldad Caro ha presentado dos paisajes urbanos en blanco y negro con un aire cercano a la abstracción geométrica en la que el ser humano aparece a una escala muy reducida.
Antonio del Hierro Laín, a pesar de haber empezado a hacer fotografías con cámara réflex hace apenas un año, pone de manifiesto su dominio técnico pero, a su vez, su buen criterio y creatividad.
Antonio González Albalate, uno de los jóvenes que han participado, presenta una puesta de sol y un paisaje con unas luces y colores muy sugerentes.
Puesta de sol marina
Kiko Comino, experimentado fotógrafo, expone una puesta de sol marina con una mujer en movimiento congelado de gran dificultad técnica, y un retrato en blanco y negro en la que destaca el perfecto equilibrio entre luces y sombras.
Begoña de la Cruz Merino ha seleccionado para la ocasión una cascada de las Lagunas de Ruidera con el efecto del agua de seda o efecto sedoso.
La fotógrafa profesional Margo Zúñiga ofrece un sugerente desnudo y un paisaje al atardecer con un modelo y unas luces, en blanco y negro, de gran belleza.
Ángel Navas Becerro, con dos fotografías de bodas en blanco y negro, sorprende captando ese ambiente festivo, juvenil y feliz de los bailes de las bodas, una mirada que huye de la convencionalidad y que aporta frescor y naturalidad.
Félix Ortega Freire, con una larga trayectoria fotográfica, ha optado por seleccionar dos fotografías que aúnan los valores estéticos con el gran valor documental y humano, con sendos retratos de dos personas mayores ya fallecidas en sus respectivos lugares de trabajo, una fragua y el campo con el ganado.
Andrea Rivero Enríquez, por su parte, irrumpe con la fuerza de la juventud con dos autorretratos de gran belleza, uno de ellos en blanco y negro y de muy considerable dificultad.
En su caso, ha terminado diciendo, he presentado dos superficies planas un tanto minimalistas, una de ellas, un fragmento de un paisaje natural calcinado premeditadamente en el que ha sobrevivido una inflorescencia, una pequeña mueca de denuncia, y unas sombras en una pared.