Para ello, la alcaldesa de Alcázar de San Juan, Rosa Melchor, ha anunciado que en los próximos 6 meses, se abordará esta iniciativa que delimitará la zona 30 al noreste por las calles General Alcañiz, Miguel de Unamuno, Pineda y San Antón; al este por Fray Indalecio Casero; al sur por la Plaza del Altozano, Cautivo, Santo Tomás, Santo Domingo, Levante y Jesús Romero; y al oeste por las calles Corredera, Aduana y Rondilla Cruz Verde.
Esta medida que acabará afectando a 48 calles de la localidad, pretende verse ampliada en un primer momento hasta el Barrio de Santa María, para proceder posteriormente con el barrio de los Devis, Ciudad Jardín y La Pradera.
Por lo tanto, se prioriza el “deambular de los peatones sin que eso signifique que sean zonas peatonales, los peatones tendrán preferencia exista o no exista pasos de peatones anunciados por señales verticales o pintadas, el peatón siempre tendrá preferencia en esas zonas 30 pero con el conocimiento y la conciencia de que sigue habiendo vehículos”, ha explicado.
De este modo, los usuarios de bicicletas mayores de 12 años, que según el Código de Circulación están consideradas como vehículos, deberán acatar esta normativa debiendo incorporarse a la calzada
Se trata de, según ha indicado Melchor, facilitar la circulación de bicicletas por la calzada, el cruce de los peatones por cualquier lugar, el descanso y la mejora del bienestar de los vecinos que residan en estas zonas 30. “Se evitan acelerones, se reduce la polución, la contaminación, al reducirse la velocidad, las molestias que esto significa y los peligros que pueda conllevar.
Igualmente ha destacado que esto será una “fase transicional que en uno o dos años nos lleve a ampliar las zonas peatonales alcazareñas”. La nueva zona 30 afectará a 7.749 metros lineales que equivalen a un área de aproximadamente 314.000 metros cuadrados de la ciudad.