Es la máxima operación policial realizada en Puertollano y Argamasilla de Calatrava contra el tráfico de estupefacientes, una operación de tráfico de drogas a nivel internacional. En la misma han colaborado efectivos policiales de Puertollano, Ciudad Real, Albacete y Madrid, incluidos dos equipos caninos. Una organización criminal que la policía de Puertollano no tenía localizada en la ciudad en operaciones anteriores, si bien el cabecilla de la misma contaba con antecedentes policiales.
La operación tuvo lugar el pasado jueves con el registro de cuatro domicilios -dos de Puertollano y dos de Argamasilla de Calatrava- y se saldó con la detención de seis personas como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas. El cabecilla de esta banda criminal, de 36 años, dedicada al tráfico de estupefacientes ha ingresado en prisión, los otros cinco detenidos quedaron en libertad con cargos.
Cantidad de cocaína
En esta operación se han incautado hasta 700 gramos de cocaína -tanto en polvo como en roca-, 420 gramos de marihuana, sustancias anabolizantes empleadas por deportistas para aumentar su rendimiento, utensilios para la preparación y confección de dosis como cuchillos, recortes de plástico y una balanza, además de contar con 11.565 euros en metálico, 27.000 guaraníes -moneda nacional de Paraguay-, una televisión de 55 pulgadas, una pistola simulada, un rifle, un spray de defensa, numerosos teléfonos móviles, ordenadores portátiles y de sobremesa, anotaciones, agendas, cartillas de ahorro y justificantes de envío de dinero.
Investigación
La investigación se realiza a raíz del aumento del consumo de cocaína en la ciudad, lo que hizo tener conocimiento de posibles vendedores de sustancias estupefacientes, ante este incremento en el consumo.
Con motivo de la aplicación del Plan Nacional contra la Trata de Seres Humanos con fines de explotación sexual, los investigadores llevaron a cabo actuaciones en clubes de alterne y establecimientos de hostelería de la comarca de Puertollano, obteniendo información acerca de una ciudadana de origen sudamericano, que podría estar captando a personas para que introdujeran estupefacientes en España, información ésta que se complementaba con la anterior.
Esta mujer utilizaba un apodo, por lo que fue difícil para la policía conocer la identidad de la misma. Tras las investigaciones oportunas pudo averiguarse que se hallaba en España de manera irregular, mantenía una relación sentimental con un ciudadano español y llevaba un alto nivel de vida, a pesar de no tener ninguna ocupación laboral.
A medida que la investigación avanzaba se fueron identificando, uno a uno, cada integrante del grupo y las funciones que realizaban, entre las que estaban la venta y distribución de sustancias estupefacientes y envío de dinero al extranjero, además se pudo verificar que el cabecilla de la organización intercambiaba cocaína por teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos como televisores.
En los primeros meses de este año la pareja del cabecilla de la organización criminal se desplazó a su país de origen y, ante el empleo de terceras personas, por parte de su pareja, para enviarle dinero, hizo sospechar de la posible llegada de algún envío de sustancias estupefacientes, principalmente cocaína.
Al regresar la mujer de nuevo aumentó el consumo de cocaína lo que desembocó en un operativo policial simultáneo en las localidades de Puertollano y Argamasilla de Calatrava.
