Tras superar el ecuador de la campaña, la producción de almendra en Castilla-La Mancha está cumpliendo las estimaciones al alza de la Mesa Nacional de Frutos Secos, con crecimientos previstos del 60% y más de 10.000 toneladas.
Estas cifras influirán en el repunte del 13% previsto en toda España, donde se han calculado alcanzar hasta las 60.400 toneladas.
Así lo ha confirmado Emilio Galdrán, portavoz de Frutos Secos de Cooperativas Agroalimentarias Castilla-La Mancha, que ha subrayado el potencial castellano-manchego del leñoso, que este año crecerá por encima de Andalucía, tras la incorporación a la producción “campaña a campaña” de varias miles de hectáreas, sobre todo en las provincias de Albacete -líder en la región- y Ciudad Real.
Según sus datos, la superficie de almendro castellano-manchego ha crecido en tres años en más de 20.000 hectáreas hasta las más de 100.000 h, “y eso se nota en la cosecha”, este año además beneficiada por la climatología, “con árboles muy cargados”.
Galdrán ha indicado que la recolecta “ha vuelto a su tiempo, tras el adelanto de los últimos años, con un gran repunte “de más del doble”que alcanzará “las 10.000 u 11.000 toneladas”.
Las últimas previsiones del Ministerio de Agricultura, publicadas en julio, eran todavía más positivas, con 34.778 toneladas calculadas para la presente recolección autonómica, entre las 19.350 t para Albacete, las 4.500 t para Ciudad Real, las 5.575 t para Cuenca, las 207 t para Guadalajara y las 5.145 t para Toledo.
Precios
Respecto a los precios, ha explicado que aunque han empezado con bajadas de hasta 20 céntimos el kilo, las cotizaciones son “relativamente normales” y hasta ahora están cubriendo los gastos de producción, frente a los de pasadas temporadas “excesivamente altos por que no eran reales”.
Este lunes, la Lonja de Albacete consignó cotizaciones para la marcona de 5,05 euros el kilo, tras perder 5 céntimos, 4,95 para la largueta, con la misma pérdida, mientras que la comuna cayó en 20 céntimos y se situó en 4,60 euros el kilo, la guara cotizó a 4,75 céntimos/kilo (tras bajar en 15 céntimos) y la ecológica a 6,50, tras retroceder en 10 céntimos.
La almendra americana, que lidera las cotizaciones y es referente en el mercado por sus grandes volúmenes, también está bajando sus precios, aunque “por calidad deberían estar nuestras variedades por encima en valor”.
El también gerente de la cooperativa Comarcal Sierra de Segura, que cuenta con algo más de 8.000 hectáreas dedicadas al cultivo de la almendra, ha comentado que la conocida como comuna –a su vez con varios subtipos- es la más cultivada en Castilla-La Mancha, al igual que la largueta y la marcona.
La cuarta parte de la producción española
Por su parte, Fernando Pinedo, técnico ingeniero de la delegación en Motilla del Palancar (Cuenca) de El Crisol de Frutos Secos, también ha coincidido en subrayar las buenas perspectivas para la almendra castellano-manchega en la presente recolección, tras las entradas de las producciones de las variedades más tempranas.
Esta Organización de Productores de Frutas y Hortalizas (OPFH) conquense recoge la cuarta parte de la producción española, con una media de entre 10 y 12 millones de kilos de almendra con cáscara que, posteriormente, procesan en sus instalaciones y ya en grano se envía a la central de la empresa en Tarragona.
El grupo nacional exporta almendra a otros países, así como sirve a clientes tan importantes en España como De La Viuda para la elaboración de mazapanes y dulces de Navidad.
Pinedo ha señalado que la recogida del árbol se alargará hasta mediados de octubre, aunque “nosotros seguiremos recibiendo hasta noviembre” porque muchos productores tienen viñas y están en plena vendimia.
Sobre los precios, explica que están a la baja porque “los almacenes están saturados”, y los de esta OPFH eran similares este lunes a los de las lonjas, a 5 euros el kilo de marcona, a 4,80 la largueta, a 4,45 la guara, a 4,35 la comuna, y a 6,35 la ecológica.
Mala suerte
Aunque el escenario es inigualable en lo positivo para la campaña almendrera, Juan Miguel Requena, productor de Villanueva de la Fuente, ha tenido peor suerte y apenas si obtendrá una mínima producción en sus siete hectáreas, a causa de la granizada que sufrió la explotación el 1 de julio, que le ha hecho “perder todo”.
Señala que la comuna es la variedad “reina” en la comarca, “donde hay una buena cosecha” en general, si bien las nuevas plantaciones están apostando por otras de floración tardía como la constantí o marinada “para que sean más productivas”.
Pistacho
De la misma manera, el pistacho, otro de los leñosos alternativos muy cultivados en la región, también tiene buenas perspectivas en la recolección que se comienza estos días. La extensión de pistachero sigue creciendo, según Cooperativas Agroalimentarias, con unas 3.500 hectáreas plantadas, casi 2.000 de ellas injertadas, y de éstas, unas 400 están en plena producción.
