La Federación de Caza de Castilla-La Mancha, parte activa en el proceso contra una mujer detenida en 2029 en Tomelloso por publicar graves insultos a cazadores, taurinos y fuerzas de seguridad en Facebook, celebra que finalmente no se archive el caso y la denunciada vaya a juicio, aunque no por delito de odio, como pretendía, sino por injurias graves a las fuerzas de seguridad.
“Hay que ponerle freno a los ataques en redes sociales a los cazadores y a la impunidad con la que se vienen perpetrando”, destaca el presidente de la Federación regional Agustín Rabadán en un comunicado en el que celebra que la Audiencia Provincial, tal y como adelantó ayer Lanza, haya decretado la apertura de juicio por injurias en un caso que habían sobreseído los juzgados de Tomelloso.
“Decisiones como estas son muy necesarias para proteger la dignidad de cientos de miles de españoles que realizan una actividad legal y legítima”, remarca.
Necesidad de modificar el delito de odio
Para Santiago Ballesteros, abogado de la Federación de Caza de Castilla-La Mancha que lleva el caso, la Audiencia Provincial viene a reconocer lo que es un clamor social, la necesidad de modificar el delito de odio en el sentido “parar los pies a los ‘odiadores’ y a quienes aprovechan el anonimato, la ausencia de filtro y la impunidad actual para incitar a la violencia más gratuita”.
La Federación de Caza tuvo que recurrir también a la Audiencia Provincial ante la oposición de la fiscalía y el juez instructor a que se personaran en el proceso y seguirán adelante, aunque sea para asegurarse la condena por injurias.