El acto, organizado por la Oficina de Atención al Ciudadano de Vox, ha registrado una nutrida presencia de público, con notable presencia de agentes de Cuerpos de Seguridad y también del diputado nacional, Ricardo Chamorro y del presidente provincial y diputado regional, Luis Blázquez. Los concejales de Vox en el Ayuntamiento, Elena Villahermosa y Benito Benito, han presentado a este experto en criminología que ha alertado del auge de la criminalidad y que ha vinculado con la inmigración descontrolada.
En su exposición, Vázquez ha recordado su vaticinio de que el 2022 sería “el primer año de la década de mayor criminalidad violenta jamás vista por ninguna generación viva en España exceptuando la guerra” y que se viviría lo que se vive en países europeos como Francia o Suecia “donde se han perdido barrios y ciudades enteras”.
“Entre el orden y el caos no hay término medio”, ha subrayado un hombre que tiene abiertos varios expedientes por las tesis que sostiene en materia de seguridad y que asegura haber sufrido “una auténtica persecución”. Según ha afirmado “las violaciones de niñas en España se han incrementado un 135%” y ha abogado por un cambio de modelo en la lucha contra la delincuencia actual “que poco o nada tiene que ver con la de treinta años o cuarenta años atrás”.
Para Vázquez, España no ha entrado todavía en la alarmante situación de países como Francia, Suecia o Bélgica “pero estamos al borde del precipicio y si no se actúa con celeridad y contundencia en cinco años podemos estar en la misma situación, aunque ya tenemos alguna ciudad como Barcelona que se ha perdido por las políticas de su alcaldesa”. El conferenciante ha criticado “el manejo de los datos estadísticos de la delincuencia por los políticos que encubren una realidad mucho más dura”.
Para Blazquez ni el PSOE ni tampoco el PP han acertado en el modelo y ha confiado en que se produzca “un cambio cultural que se traduzca en votos para que otros partidos, como Vox, aborden con determinación la situación”. Igualmente, se ha mostrado partidario de una inmigración controlada “donde los que vengan tienen que aceptar nuestra cultura y valores” y ha insistido en que los nuevos y sofisticados métodos de delincuencia “hacen urgente la elaboración de una nueva estrategia y modelo”. De sus críticas no se han librado los medios de comunicación que, según ha explicado, “muestran siempre una realidad distorsionada que perjudica a los policías”.
Ha sido hora y media de conferencia a la que ha seguido otra media hora de preguntas de los asistentes.