Podemos-Equo Valdepeñas ha pedido que haya comedores escolares de calidad en la localidad. En concreto se ha referido al comedor del colegio Lucero criticando que la comida sea de catering y pidiendo que la comida se elabore en la cocina del centro. Señala que más de cien escolares disfrutan todos los días en este centro de un menú elaborado en otra localidad “en un comedor que no dispone de cocina propia, después de años de promesas electorales”.
Podemos-Equo sugiere disponer de cocina en el colegio, con alimentos cocinados a diario y servidos en caliente. “Hasta ahora contamos con tres centros infantiles en Valdepeñas donde se ofrece ese servicio. ¿Por qué un cambio de paradigma?”.
Apunta que colegios como Virgen de la Cabeza o Agustinas tienen comedor con un criterio de elección de un catering local y de apoyo a las economías del municipio.
“En pocas décadas, se ha pasado de un modelo de gestión de cocinas en los propios colegios, donde la alimentación formaba parte del proceso educativo y los alimentos se adquirían en el entorno más próximo elaborando recetas tradicionales, a otro en el que se cocina lejos, los alimentos pueden llegar de cualquier parte del mundo y se prima el beneficio empresarial sobre otras consideraciones. Las personas productoras y el pequeño comercio han perdido su mercado de cercanía, mientras los usuarios y usuarias de los comedores han visto cómo la calidad de la alimentación ha empeorado. El modelo predominante está desligando la población de la tierra, de la cultura alimentaria y de la tradición gastronómica, convirtiendo la alimentación escolar en un negocio (a costa de la prestación del servicio público) y a los escolares en consumidores con poca elección. ¿Cuántos puestos de trabajo locales se evitan con la supresión de las cocinas en el municipio? La deslocalización que supone el catering amortiza puestos de trabajo fijos y estables: cocineros, pinches, limpiadoras, y otros”.
“Desde Podemos Valdepeñas apostamos por comedores escolares con cocinas propias, donde el comedor escolar y la cocina sean espacios educativos del centro, en los que el alumnado aprenda que comer y alimentarse no son sinónimos. Y así nos lo ha hecho llegar la ciudadanía en nuestro Programa Participativo. Todo ello es posible, cuando el servicio público se presta sin ánimo de lucro, cuando nos hacemos conscientes de que nuestro alimento es nuestra medicina y que lo natural es cocinar con tiempo y en su tiempo, con cocina en el comedor”.
Entre los beneficios de un comedor de calidad con cocina propia y gestión directa, Podemos-Equo destaca una mejor calidad de los alimentos, al no primar el beneficio económico, el fomento del empleo local con generación de puestos de trabajo estables y el apoyo a la economía local y al medio ambiente, si el comedor opta por alimentos de temporada, de proximidad, frescos y respetuosos con el entorno, evitando que éstos recorran grandes distancias.
“Afortunadamente, cada vez son más las comunidades escolares que trabajan para hacer de sus comedores espacios transformadores, que eduquen en hábitos alimentarios saludables y opten por producciones sostenibles. Una apuesta porque la comida sea no solo un acto de disfrute y celebración, sino un ejercicio cotidiano a favor de sociedades más justas y sostenibles, tal como podéis encontrar en http://delcampoalcole.org/ o http://alimentarelcambio.es/”.
“Esperemos que las familias y los centros educativos de Valdepeñas opten por darle importancia a la comida diaria que reciben nuestros hijos e hijas y apuesten por un cambio de mirada. Así mismo, valoramos el esfuerzo que ha realizado el personal del Centro Público El Lucero por poner en marcha un comedor de tales dimensiones. Nuestra apuesta siempre será poner en valor los servicios públicos de calidad en contraposición a la externalización y privatización de servicios tan importantes”.