Sumidos en medio de una gran devoción, emoción y fervor religioso, y con la mirada puesta en el cielo, pues algunas previsiones amenazaban tormenta, la tarde del Domingo de Ramos finalmente ha lucido con mucho esplendor con la Estación de Penitencia de los pasos de del Cristo Ultrajado y Coronado de Espinas y la Virgen del Perdón, de la Hermandad de la Coronación de Espinas, que han vuelto a procesionar a costal por Ciudad Real.
Tras muchos meses de ensayos, sacrificios e ilusiones, este Domingo de Ramos ha espoleado la participación de la Coronación de Espinas ante la atenta mirada de los cientos de ciudadrealeños y visitantes que se han agolpado por las calles de la capital.
A las seis en punto de la tarde, el paso de Misterio de la Coronación de Espinas ha cruzado el atrio de la puerta de la Parroquia de la Merced de la capital iniciando así el tradicional recorrido con los fieles durante el Domingo de Ramos.
Numerosas han sido las personas que se han concentrado a las puertas de la parroquia Santa María del Prado para vivir el primer día oficial de la Semana Santa. Han podido contemplar una de las estampas más bellas de cuantas tienen lugar en la capital manchega durante su Semana de Pasión.
A pesar de la enorme belleza, el momento no ha estado exento de una gran dificultad, pues los dos pasos de la Hermandad de la Coronación de Espinas han sido sacados de rodillas desde la Parroquia Santa María del Prado.
“Los momentos más complicados se producen durante la salida y la entrada en el templo de Jesús y de la Virgen, pues las dos cuadrillas salen de rodillas”, reconoce la presidenta de la Hermandad del Santísimo Cristo Ultrajado y Coronado de Espinas y Santa María del Perdón”, Yolanda Gómez.
Sobre las seis y media de la tarde, ambos pasos ya se habían elevado sobre el cielo de Ciudad Real bajo el ritmo marcado por la música cofrade y el aplauso del público que allí se ha congregado después de las tradicionales ‘levantás’.
A la altura del Museo Elisa Cendrero, en la calle Toledo, un vecino ha derrochado devoción y fe, dedicándole una saeta a la Virgen del Perdón.
Los nazarenos que han acompañado las imágenes de Cristo Ultrajado y Coronado de Espinas y a la Virgen del Perdón, han vestido túnica blanca con fajín clámide de color púrpura, llevando el capillo también blanco. Han portado cirios de color granate en el paso del misterio, y blancos en el del palio.
Dentro de su ya tradicional recorrido por las calles de Ciudad Real, este año se ha introducido una novedad, pues a la altura del Carmen se ha realizado una pequeña modificación, pues la procesión ha pasado por la Plaza de los Remedios haciendo un saludo al Cristo del Amor, en el que ha sido uno de los momentos más emotivos de la tarde.
El paso del Cristo de la Coronación de Espinas y las figuras secundarias que lo han acompañado durante su desfile procesional, y que son obra de Jesús Méndez Lastrucci, ha sido llevado por 40 costaleros y ha estado acompañado durante su recorrido por la Agrupación Musical Santísimo Cristo de la Piedad, de Miguelturra.
Sin duda, una de las peculiaridades más bellas de esta procesión del Domingo de Ramos es que el paso de la Virgen del Perdón es portado únicamente por mujeres, siendo 35 las encargadas de llevarlo a costal. De hecho, la de la ‘Coronación’, es la única de las hermandades que procesionan en Ciudad Real que cuenta con una cuadrilla exclusiva de mujeres costaleras.
La Virgen Santa María del Perdón, también obra de Jesús Méndez Lastrucci, ha estrenado por primera vez en procesión este Domingo de Ramos una toca de sobremanto diseñada por Oscar Ruiz Ramírez, y un broche repujado y cincelado a mano, en metal plateado y dorado con perlas y pedrería, que está inspirado en el escudo de la corporación. Estos dos estrenos han sido donados a la Virgen como regalo de sus costaleras con motivo del 25 aniversario de la cuadrilla.
Cientos de personas arropan a Jesús y a la Virgen en su Estación de Penitencia
Durante todo el recorrido, tanto el misterio de Jesús como el palio de la Virgen se han visto arropados por cientos de ciudadrealeños y visitantes que han querido vivir en primera persona este Domingo de Ramos de la Semana Santa de Ciudad Real, declarada de Interés Turístico Nacional.
El trayecto procesional ha recorrido las calles Toledo, María Cristina, Cruz, Paloma, Cuchillería, María Cristina, Feria, Prado, Azucena, Carmen, Pedrera Baja, Callejón de los Remedios, Plaza Cristo del Amor, Cuenca, Estación Vía Crucis, Paz, Rosa, Caballeros y Pasaje de la Merced.
Pasadas las diez y cuarto de la noche ha cerrado su paso por las calles de Ciudad Real esta procesión que durante más de cuatro horas ha recorrido el centro de la capital.
Durante la estación de penitencia ha participado un grupo de mujeres de la Policía Nacional, con traje de gala. Detrás del palio, y acompañando a la Virgen del Perdón, se encontraban el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares; el presidente de la Diputación provincial, Miguel Ángel Valverde; la concejala de Festejos, Fátima de la Flor; la concejala de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Eva María Masías; y la presidenta nacional de Afammer, Carmen Quintanilla.