La Asociación Española de Periodistas y Escritores del Vino (Aepev) ha abierto una campaña para promover que el vino sea declarado Bebida Nacional de España y Bien de Interés Cultural.
Según ha confirmado José Luis Murcia, presidente de la entidad, que agrupa a periodistas, comunicadores, editores y escritores del vino, se trata de reconocer el legado de un producto ligado al hombre y a su cultura desde el inicio de los tiempos, especialmente en España, con el fin de que, tanto particulares como las instituciones, “se unan en su defensa y su consumo consciente, moderado y responsable”.
Para empezar, han lanzado una petición en la plataforma Change.org, que ya reúne más de 1.900 firmas (pretenden alcanzar las 2.500), y están informando a los medios del proyecto para que “empiece a sonar, se hable de ello, y la idea esté en la calle”.
La iniciativa está “en la línea de la aprobada en países del nuevo mundo como Argentina y Uruguay”, con el objetivo de que el vino, en España con una industria de gran potencial, “sea declarada bebida nacional y que en todas las recepciones oficiales del Gobierno, dentro y fuera del país, esté presente”.
La idea surgió, señala Murcia, en un reciente encuentro de los miembros de la asociación, en la que bosquejaron las acciones más inmediatas a realizar, como fue iniciar la campaña de recogida de firmas en internet, que incorpora un manifiesto que justitica la petición.
De la misma manera, también han contactado con la Asociación Parlamentaria por la Cultura de la Viña y el Vino, presidida por el diputado ‘popular’ José Cruz Pérez Lapazarán, que impulsó y a la que perteneció el exparlamentario socialista de origen ciudarrealeño Alejandro Alonso.
La apuesta para que se reconozca al vino como elemento cultural integrador de la sociedad, según Murcia, fue “muy bien acogida” por los representantes políticos de distintos grupos integrados en la asociación, al igual que han previsto que visiten la Feria Nacional del Vino (Fenavin), que se celebrará en Ciudad Real entre el 6 y el 8 de mayo, como respald público a la petición.
Otros parlamentarios como José María Barreda, expresidente de Castilla-La Mancha, y el propio Alonso “están encantados con la idea”, ya que la Comunidad Autónoma copa el 50% del viñedo nacional y gran parte de la producción española de vino, al igual que Ciudad Real, qeu tiene la máxima vinculación con este producto y dos de las más emblemáticas denominaciones de origen, como son Valdepeñas y La Mancha.
También llamarán a la puerta de la Federación Española del Vino (FEV) y la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE), con el fin de que llegue al Parlamento y que la proposición de que el vino sea declarado ‘Bebida Nacional de España’ y ‘Bien de Interés Cultural’ “se apruebe por unanimidad”.
Identidad colectiva
En el manifiesto señalan que el vino “ha forjado la personalidad, la identidad colectiva y el carácter de numerosos lugares”, y además “es garantía de supervivencia de pueblos y paisajes, y un atractivo turístico de primer orden”.
Como parte inseparable de la cultura a lo largo de los siglos en numerosas manifestaciones, reivindican que sea reconocido como bebida y alimento esencial, “orgullo por lo nuestro, por nuestros terruños, por nuestros productos y nuestras raíces. Un tesoro”.
Defienden, por tanto, “todos los vinos de España y cuanto los mismos representan para nuestra agricultura, nuestro placer, nuestra sociedad y el equilibrio medioambiental”.
