Cartas de presentación para nuevos clientes y esmeradas propuestas para afianzar a los asiduos ‘parroquianos’, los bocados de Tapearte animan a muchos a ir de vinos o cañas recorriendo los establecimientos participantes para degustar especiales manjares en formato de tapa.
Agar Agar sirve un bombón de papada de cerdo ibérico preparada a baja temperatura, de manera que se deshace en boca, recubierta de almendra triturada y con salsa de reducción de carne, así como chocolate, que le da el toque dulce junto a una crema de boniato. Todo ello, decorado con germinados, brotes y flores como pensamientos comestibles.
Es como un delicioso Ferrero Rocher de carne, “crujiente por fuera, mientras que por dentro se deshace”, comenta Luis Adolfo Espinar, que considera positivas iniciativas como Tapearte para fomentar la hostelería y animarse a elaborar y probar bocados diferentes a los habituales.
Potente y enérgico como para llegar a todos los puertos es el ‘Asalto Vikingo’, de A Sirigaita, que participa con una barca de pan con sabrosa carne de osobuco acompañada de alioli de mango y crujiente de puerro que asemeja remos, mientras que por vela lleva plátano macho en tempura.
Un poco de reducción de Pedro Ximénez por encima completa esta apetitosa embarcación que está gustando mucho entre sus clientes, quienes agradecen que se apueste por guisos en las tapas, expone Ramsés Casado, gerente de A Sirigaita.
En La Frívola, torreznos a la naranja con mojo verde canario y cebolla roja en tempura frita y un toque de lima sobre una torta de trigo conforman el ‘Taco Frívolo’ del que ya se han servido varios cientos.
Frescura del cilantro del mojo y el sabor de la lima
Contrasta el contundente sabor de los torreznos con la frescura del cilantro del mojo y el sabor de la lima, indica Álvaro Navarrete, responsable de un local cuyo nombre responde al gusto por lo informal, por lo bueno y por la vida, a “hacer las cosas sin intenciones mucho más allá de disfrutar haciéndolas bien”, y quien observa con “muy buenas perspectivas” esta XIII edición de Tapearte.
Si se quiere disfrutar de todo lo bueno de una merienda en el campo en un solo bocado, hay que ir a El Ventero y probar un completísimo entrepán con todos los sabores reunidos de, por ejemplo, una escapada otoñal a la Tabla de la Yedra: tortilla, lomo, beicon, pisto y queso.
Sobre pan malteado, Jesús Moreno Cid pone patata confitada y pimiento, beicon y lomo, lo hornea y añade queso, picatoste frito en mantequilla que le da el punto ‘crunch’, crema de pisto y polvo de torreznos. Aunque la reciente celebración de ‘TapaReal’ estuvo algo “más animada”, aprecia Moreno Cid, el ‘Entrepán del Ventero’ está gustando y son muchos los que repiten.
Sabores mediterráneos se funden en la propuesta de La Taberna Napoletana con su ‘Sueño de una noche de otoño’, tapa con los colores de esta estación. Sobre una cama de pimiento amarillo, una berenjena marinada presenta una textura muy similar a la del queso burrata con la que se recubre, coronándose con una anchoa en aceite de oliva y algas.
La tapa, con una conjunción de productos de España e Italia, está “gustando mucho”, indica Francesco Stragapede, que valora convocatorias como Tapearte que atraen a visitantes de otras localidades y dan a conocer la oferta de los establecimientos a nuevos clientes.
La rotundidad de la morcilla de Burgos pasa a la historia con la combinación dulcificada que propone El Paleto, que prepara una base de hojaldre con cebolla caramelizada sobre la que sitúa la morcilla con Denominación de Origen, condimentándola con salsa de frutos del bosque. En muy atractiva convierte la morcilla de arroz su propuesta solicitada por muchos de sus clientes este fin de semana.
Éstas son sólo algunas de las 29 apetitosas tapas de establecimientos hosteleros de Ciudad Real que participan hasta el 20 de octubre en la XIII edición de TapeArte.
