CCOO de Castilla-La Mancha ha afirmado que todos los planes de recuperación y de futuro tienen que tener la creación y el mantenimiento del empleo de calidad y la mejora de las condiciones de trabajo como base imprescindible para avanzar de forma justa e incluyente.
“Castilla-La Mancha no ha dejado de ser una región con salarios bajos, lo que hace más vulnerable a la población y se refleja en las estadísticas que miden el riesgo de pobreza”, ha afirmado la secretaria regional de Empleo y Políticas Sociales de CCOO en la región, María Ángeles Castellanos, quien ha insistido en hacer hincapié en que “el reparto de la riqueza, los salarios dignos y el empleo de calidad son elementos fundamentales para mejorar la calidad de vida y para hacer más resilientes a las y los trabajadores frente a situaciones como la actual”, según ha informado el sindicato en nota de prensa.
Este jueves se han conocido los datos de la Encuesta Trimestral de Coste Laboral que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE). En esta estadística, como en la mayoría de las que se están publicando en tiempos de COVID-19, se tienen que analizar los resultados con parámetros diferentes a los que se utilizaban antes de la pandemia.
Así, si hace un año el descenso del coste laboral estaba más vinculado a salarios más bajos y, por tanto, era un acontecimiento negativo, actualmente un descenso de coste laboral puede implicar también que los salarios que se pagan por el tiempo de trabajo son más bajos, pero también porque las empresas no pagan parte de los costes de sus plantillas en la medida en la que estas están incluidas en un ERTE, ha explicado Castellanos.
En cualquier caso, los descensos de los costes laborales son un elemento que preocupa a CCOO. El coste laboral en el segundo trimestre de 2020 se sitúa en 2.239,48 euros, lo que supone un 6,53% menos que en el mismo periodo del año anterior y un 1,79% menos que en el primer trimestre de 2020.
Respecto a la media estatal el coste laboral regional se sitúa 203 euros por debajo. El sector de la construcción de Castilla-La Mancha registra los costes más bajos de todo el país, puesto que antes ocupaba el sector servicios.
Si se analiza la serie histórica desde 2008, el segundo trimestre del año ha sido un trimestre con incrementos de coste laboral, este año se ha roto esa tendencia, sin duda, a causa de la situación sobrevenida con la declaración del estado de alarma.
La secretaria regional de Empleo y Políticas Sociales de CCOO en la región ha señalado que hay que tener en cuenta que las personas que están incluidas en un ERTE siguen formando parte de la plantilla de sus empresas, pero no perciben salarios y además las cotizaciones sociales a cargo de los empleadores están exoneradas en su mayor parte.
De esta forma se ve cómo comunidades autónomas como Baleares o Canarias, que a finales de junio presentaban un porcentaje de personas que ya habían salido de los ERTE menor al registrado en Castilla-La Mancha, tienen descensos de sus costes laborales en términos interanuales que superan el 20%, por tanto mucho mayores que los de la región.
Por sectores, en Castilla-La Mancha la construcción registra los costes laborales más bajos del todo el país con 2.099,72 euros al mes. Es la única comunidad autónoma en la que el coste está por debajo de los 2.100 euros mensuales, muy lejos de los 2.958,39 euros de Euskadi.
Respecto a su evolución trimestral, en Castilla-La Mancha se ha registrado un descenso del 3,70% mientras que en el conjunto del Estado el coste sube un 2,61%.
Los costes laborales del sector servicios alcanzan los 2.182,78 en Castilla-La Mancha, 705,16 euros por debajo de los costes en la Comunidad de Madrid.
Respecto al trimestre anterior han bajado un 0,26% y un 6,08% respecto al segundo trimestre de 2019.
La industria se mantiene como el sector en el que el coste laboral es más elevado, en Castilla-La Mancha alcanza los 2.675,04 euros al mes, pero, aun siendo el sector con salarios más altos, está muy lejos de los datos de comunidades como la madrileña con un coste de 4.039,12 euros.
También la industria ha visto reducir sus costes respecto a mediados de 2019.
