Kike Reguero ha salido a la palestra para hablar del momento que atraviesa el Calvo Sotelo de Puertollano. El equipo de Andrés Viñas caía el pasado domingo ante el Azuqueca víctima de dos errores defensivos en dos córners casi calcados que supuso la victoria de los de Manolo Alfaro. Con una victoria y un empate en su casillero, el equipo industrial tan solo cuenta con cuatro puntos en su casillero. El trabajo es patente, pero lo resultados no terminan de llegar.
Según Reguero, “el equipo se está adaptando a la categoría. Quieras o no hay jugadores que no tienen experiencia en la categoría o han jugado muy poco, y eso se nota. No obstante, “estamos haciendo las cosas bien, pero no están llegando los resultados”, por lo que no queda otra que “seguir trabajando ya que de los errores se aprende y tenemos que tomar nota de ello”.
En este sentido, el portero recordaba que “en tercera, el balón parado es clave y tuvimos los errores de encajar los dos goles casi iguales. Es ahí donde aparece la inexperiencia y es ahí donde tenemos que aprender y poner los cinco sentidos para corregir los errores” porque, al fin y al cabo, “al final, la clave es encajar lo mínimo, dejar la portería a cero, minimizar errores y aprovechar las tuyas para sumar el máximo de puntos”.
Además, arengaba a los suyos diciendo que “todos nos tenemos que concienciar de que nos jugamos mucho, pero estoy seguro que el equipo va a ir a más porque hay margen de mejora. Hay futbolistas que todavía no han mostrado su potencial y lo van a hacer, no tengo la menor duda y, en cuanto encajen las piezas, daremos un vuelco a la situación”.
Por último, señalaba al Villacañas como una nueva oportunidad “para salir a por todas, ganar y coger mucha confianza”.