La inestabilidad del tiempo aconsejó que el acto institucional del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer se trasladase de la Plaza Mayor al salón de plenos del Ayuntamiento, el cual se llenó, quedándose bastantes personas sin asiento e incluso fuera. Eso sí, todos los presentes se levantaron para bailar el ya ‘hit’ de los alumnos del IES Maestro Juan de Ávila que, dirigido por Miguel Ángel Maroto, cuenta con más de cuatro millones de visualizaciones en Facebook y más de medio millón en Youtube.
Ante las demandas de control de la forma de vestir y de la comunicación en las redes sociales, las alumnas del Juan de Ávila se rebelan y claman por su libertad en la canción ‘Sólo quiero bailar’, composición a ritmo de hip hop que aborda un tema como la violencia de género del que se debe hablar más en las aulas, resaltó Maroto, que consideró una vergüenza que haya quien quiera echar para atrás el esfuerzo para evitar una violencia ejercida por hombres contra mujeres por celos, machismo o porque se creen superiores.
Con esta canción culminó el acto que comenzó con la performance ‘Con aroma de mujer. MujerES’, de Flor Canales, quien realizó un recorrido por la historia para mostrar cómo a la población femenina se la ha dejado apartada en el ejercicio de derechos y en la representatividad en espacios públicos, condenándola por lo que se aplaude en los hombres, a quienes se les reserva el deseo. A todas las víctimas del machismo recordó, abogó por que “dejen de hacernos daño” y animó a que se conozcan los rostros, historias y dolor de las mujeres maltratadas, así como a la solidaridad entre todas las mujeres, las de aquí y las de allá, las que se parecen a nosotras y las que no.
Carmen Quintanilla, presidenta de Afammer, y Elena Nogales, de Cruz Roja Juventud, tomaron el testigo para leer el manifiesto del Consejo Local de la Mujer, en el que se lamentó la muerte de 52 mujeres víctimas de maltratos en lo que va de año, se hizo un llamamiento a los hombres para que no toleren conductas violentas y machistas y se reclamaron medidas de sensibilización y programas de prevención de violencia de género, además de resaltar la importancia de la coeducación para prevenir conductas discriminatorias en todos los tramos de la enseñanza, la atención integral y la coordinación institucional para evitar duplicidades y actuar con mayor eficacia.
También en el acto, se realizó la entrega de distintivos como ‘Espacios libres de violencia de género’ a establecimientos hoteleros y comercios de la ciudad, cuyos responsables han asistido a talleres formativos sobre violencia de género para que puedan detectarla en sus negocios y llevar a cabo un protocolo de actuación. Recibieron estos distintivos el Grupo Anibe Formación, la librería Serendipia, La Ventana Natural, Cucú Mamis and Babys, Terriza Menaje, BQB Depilación Láser, Grupo Castellanos Formación y Consultoría, Masque Gestión y Desarrollo, Piel Lozano, Sicom Multimedia y Bar El Paleto.
Así mismo, la alumna de la Escuela de Arte Pedro Almodóvar, Lucía Márquez Heredia, recibió el premio por su obra ‘Hay amores que matan’ elegida para el cartel del 25-N, una piruleta rota cuyo caramelo se sustenta en un palo que asemeja la hoja de un puñal.
Ver complemente lleno el salón de plenos en un día tan reivindicativo fue un placer para la alcaldesa, Pilar Zamora, que lamentó el drama de la violencia machista y subrayó que no van a cesar la reivindicación ni la lucha hasta que no haya ni una víctima más. “Nos queremos vivas”, resaltó Zamora, que destacó, así mismo, que mientras exista la esclavitud de la trata no tendremos una igualdad real y efectiva. “Somos un gran ejército de hombres y mujeres que salimos a la calle a gritar, que no nos quedamos mirando para otro lado, sino que damos la cara y levantamos la voz para gritar que no se nos puede matar. No podemos permitir que nadie nos calle”, ni tampoco que “nos vuelvan a encerrar en nuestras casas, nos vuelvan a vestir de negro y cerrar las puertas para que no se nos vea”.