La editorial Caligrama publica ‘Todos los desastres que me llevaron hasta mí’, de la autora ciudarrealeña Nadia Verástegui, quien, con 14 años, se vio inmersa en el infierno de la anorexia y que años más tarde comenzó a escribir para reflejar su experiencia y su mensaje de aliento y esperanza.
El libro es un viaje hasta el centro de la propia autora, quien refleja cómo debió ganarle a la mente y aprender a convivir siempre alerta. “Es un perdón a uno mismo, y a quienes alguna vez en nuestra vida nos hicieron daño. Es un libro real, con hechos reales, amores reales y vivencias que escapan a la imaginación. De ahí el sentimiento y la autenticidad”.
Los relatos emocionales fueron escritos en diferentes ciudades y etapas distintas. La evolución de la autora es palpable a medida que el lector se adentra en las páginas de una obra que habla de las vueltas que da la vida, del aprendizaje constante, de buscarse a sí mismo. ‘Todos los desastres que me llevaron hasta mí’ es una confesión, un desahogo, pero también es un mensaje de aliento y esperanza a quien esté pasando por un momento oscuro en su vida. “Refuerza la autoestima y la confianza. Un ejemplo de que si yo, a pesar de todo y de tanto, hoy he cumplido mis sueños, tú, que me estás leyendo y llevas fuego dentro, podrás también”.
Verástegui lanza un mensaje a la sociedad para que aprenda a valorar a los jóvenes. “Ahora somos ‘ninis’ pluriempleados que no dejan de formarse y crecer. Hay muchas mentes ahí fuera, el secreto es saberlas despertar a tiempo. La juventud es un tesoro”, dice. El valor literario de este libro está en lo poético de los párrafos, en unos mensajes sencillos que rebosan valentía.
Nadia Verástegui nació en Ciudad Real en 1991. Estudió Enfermería en Cuenca, ciudad que ama desde entonces. Sus primeros contactos con la literatura fueron a través de la poesía y la prosa poética. ‘Todos los desastres que me llevaron hasta mí’ es su primera novela. Actualmente reside en Las Torres de Cotillas, Murcia, desde donde sigue escribiendo.