La alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, ha querido participar en la primera salida de los gigantes y cabezudos, este año con presencia de más figuras, que ha supuesto la apertura alegre de las fiestas capitalinas en honor a la Virgen del Prado.
Pasadas las 10,30 horas de la mañana los personajes del Quijote y Sancho, y el Pandorgo y la Dulcinea ataviados con los trajes manchegos, además de juglares, y los nuevos caballos con nombres de la tierra como ‘Hermoso’, ‘Desahogao’, ‘Licenciao’ o ‘Pichulero’, han dado la bienvenida a la celebración callejera de unas fiestas todavía recortadas por la pandemia del coronavirus.
La comitiva, animada por las notas de una parte de músicos de la banda, ha partido desde el Paseo del Prado por la calle Alarcos hacia otros puntos del centro de la ciudad y ha hecho las delicias de pequeños y grandes. No han faltado los maceros y figuras de profesionales de toda la vida como un cocinero y un herrero.
Masías ha acompañado al divertido conjunto de figuras, que han portado personas de las asociaciones en el recorrido que ha realizado, y ha valorado su presencia como una de las tradiciones más emblemáticas de las fiestas.
También ha celebrado que esta alegría se vaya a trasladar a otros rincones de la ciudad a lo largo de la próxima semana, con salidas a distintos barrios, cuyos itinerarios son desconocidos para preservar la formación de multitudes.
La primera edil ha destacado, igualmente, la novedad que supone esta iniciativa en el programa de actos en honor a la Virgen del Prado, en el que destacan los conciertos y actividades deportivas, y de ocio y entretenimiento para los más jóvenes y los niños.
La principal ausencia son las atracciones y puestos ambulantes, al principio previstos en el recinto anexo a La Granja, que no han podido comparecer por el aumento de la tasa de incidencia del coronavirus en la ciudad.
