La Fiscalía solicita penas de entre 14 y 9 años para los seis miembros de una banda de banda de presuntos narcotraficantes que de manera organizada procesaban, cortaban y vendían cocaína desde una finca de Alcázar de San Juan. En total, pide 68 años de prisión, 14 años para J.R.P.V., el cabecilla, 12 años para E.A.P.M., A.G.C., y E.B.A., y nueve años para R.B.B. y J.F.R..
Según el escrito de acusación del Ministerio Público, estos seis investigados serán enjuiciados por la Sección segunda de la Audiencia Provincial de Ciudad Real los próximos días 26, 27 y 28 de marzo por unos hechos ocurridos entre septiembre de 2015 y junio de 2016, cuando fueron detenidos.
Las indagaciones las iniciaron agentes de la UDYCO Central-Brigada Central de Estupefacientes del Cuerpo Nacional de Policía, al detectar que la organización, formada por ciudadanos españoles y colombianos, adquirían grandes cantidades de productos químicos, de los utilizados normalmente en laboratorios clandestinos de extracción, síntesis, elaboración, procesamiento y corte de cocaína en una finca rural a las afueras de Alcázar de San Juan.
Según detalla el informe del fiscal, el inmueble, propiedad de J.F.R., constaba de dos construcciones principales y otras accesorias, de difícil acceso y visión desde el exterior porque estaba rodeado de árboles, arbustos y otro tipo de material, además de estar vallado en todo su perímetro.
Por ello, a través de varias órdenes judiciales fueron intervenidos los teléfonos de los supuetos criminales y los investigadores comprobaron que los miembros de la banda usaban distintos vehículos que guardaban en Madrid para trasladar la droga. En los viajes que realizaban a Madrid o a otros puntos como Valencia, Barcelona o Alicante uno de los coches hacía de ‘lanzadera’.
Los efectivos policiales también realizaron tareas de vigilancia de la citada finca rústica y además de constatar las entradas y salidas de los ahora encausados, y su dedicación a la venta de importantes cantidades de sustanicas prohibídas, comprobaron que utilizaban una estancia “tipo zulo” en los bajos de la casa como laboratorio para procesar la droga. Allí ocultaban productos químicos y diverso material para la elaboración de los estupefacientes.
Finalmente, los efectivos policiales, junto al Grupo Especial de Operaciones (GEO), desarollaron un operativo el 20 de junio de 2016 en el que detuvieron a los arrestados y registraron la finca de Alcázar, donde encontraron numerosas garrafas de isopropanol, acetato de etilo, metiletilcetona, gasolina y ácido sulfúrico, además de otros envases, cajas, paquetes y una prensa hidráulica.
De la misma manera, en el domicilio en Madrid de otro de los acusados hallaron cinco paqeutes con cerca de cinco kilos de cocaína en conjunto, que hubiera tenido un valor en el mercado ilícito de más de 176.500 euros.
Solo tres de los acusados -E.A.P.M., A.G.C., E.B.A– permanecen en prisión desde el 23 de junio de 2016, mientras que el presunto cabecilla -J.R.P.V.- entró en prisión en esa misma fecha pero salió el 22 de mayo de 2017.