El Ayuntamiento de Daimiel ha aprobado por primera vez en su historia los presupuestos del año próximo, en tiempo y forma para su entrada en vigor con el año natural. Durante el pleno municipal también se han debatido las tasas e impuestos del próximo año.
En 2024, Daimiel se enfrentará a una subida del IBI sube del 0,72 al 0,79. Por su parte, la tasa de agua se eleva un 5% y la de la basura un 15%. El equipo de Gobierno destaca que en todos los casos “están por debajo de la inflación acumulada en los últimos tres años, que supera el 17%”.
En 2024 también se pagará más por las actividades deportivas municipales. También subirá el precio de la entrada al yacimiento arqueológico de la Motilla del Azuer, una decisión tomada “desde la responsabilidad” y que busca afrontar “la situación compleja” que ha generado una inflación acumulada “de más del 17%” en los últimos tres años. El resto de ordenanzas fiscales mantendrán su precio.
“Es una situación puntual, no nos gusta subir impuestos”, exponía en su defensa de esta modificación de las ordenanzas fiscales, el concejal de Hacienda, Jesús David Sánchez de Pablo. Pero también dejaba claro que “se ha hecho un estudio individualizado” de cada caso, huyendo de “soluciones fáciles y subidas generalizadas”.
Todo, remarcaba, con el objetivo de “garantizar la prestación de los servicios actuales, incluidos aquellos que son competencias de otras administraciones como los Servicios Sociales o las ayudas a autónomos y emprendedores”.
En concreto, el tipo de gravamen subirá de 0.72 a0.79, con lo que se prevé incrementar la recaudación en torno a 600.000 euros. En esa misma comparativa con 2023, la tasa de agua sube en un 5% (después de 8 años manteniendo su precio con una inflación acumulada en ese periodo de un 21,8%); la de basura en un 15% (como consecuencia de un nuevo impuesto creado por el gobierno de España) y, en el caso de las tasas de las actividades deportivas, una media del 10%. Por ejemplo, el pago del curso de las escuelas municipales deportivas subirá hasta los 60 euros. Son los casos puntuales donde se ajustan al alza.
El resto de tasas e impuestos, más de veintena, se congelan. En todos los casos el coste efectivo de los servicios supera ampliamente al importe de la tasa, y claramente son inferiores al de los municipios de nuestro entorno.
Sánchez de Pablo remarcó que todas las subidas están por debajo de la inflación acumulada en los últimos ejercicios y que, en el caso del IBI, los daimieleños “pagarán menos por su recibo en 2024 que lo que pagaban en 2013”, pese a que la inflación acumulada desde ese periodo sea de un 20,6%.
Además, puso en valor la ampliación de las exenciones que se introducen para ayudar a las economías domesticas más vulnerables y a las familias numerosas.
Precisó además que el nuevo impuesto del gobierno de España que está detrás de la subida de la tasa de basura no se repercutirá de manera automática a los vecinos, como se ha hecho en otros “ayuntamientos de la provincia como en Manzanares con una subida de la tasa del 35%”.
Otras de las novedades importantes que se introducen es en el pago de la tasa por la entrada y salida de vehículos y del vado permanente. A partir de ahora, se unificará el hecho imponible y solo pagarán los que tenga vado. Serán 30 euros anuales.
Aquellos vecinos que lo quieran retirar de sus domicilios porque no hacen uso de esa reserva de plaza tendrán todo 2024 para comunicarlo al Ayuntamiento y, desde ese momento, se ganarán zonas de aparcamiento en el municipio.
Las tasas fueron aprobadas por los nueve concejales del Partido Popular y el de VOX, Juan Carlos Sendarrubias, que entendía que las modificaciones son “normales en la situación actual” y de ahí su “apoyo excepcional” a esta subida impositiva.
El PSOE votó en contra. Su portavoz, Teresa Ortega, pidió que la tasa de agua “penalizara más a los consumidores que derrochen agua” y recriminó al equipo de Gobierno que no diga “ni mú” a la Diputación Provincial por no asumir la nueva tasa del RSU que van a pagar los ayuntamientos. “La Diputación podría asumirlo, pero ustedes ni ningún municipio del PP ha querido levantarle la voz a su presidente”, señalaba.
A continuación, también se aprobó el presupuesto municipal que en 2024 superará los 20,7 millones de euros, un incremento del 6,6%. En las cuentas municipales se refleja el impacto de la inflación ya que entre el capítulo de personal y el del gasto corriente el aumento con respecto a 2023 es de casi 1.250.000 euros, subrayó el concejal de Hacienda. En este caso, el concejal de Hacienda apuntó que el Ayuntamiento no puede acudir a la financiación externa y que pese a ese importante incremento presentan unos presupuestos ajustados que garantizan la prestación de todos los servicios que se prestan en la actualidad e incluso la apertura de dos nuevas infraestructuras municipales: el antiguo casino de la armonía y el Punto de Encuentro Juvenil.
Para el pago de la deuda e intereses el Ayuntamiento de Daimiel tendrá que destinar casi 2 millones de euros y para inversiones quedarán 480.000 euros, lo que supone un aumento del 7,3% respecto al presupuesto en curso. En este capítulo, destacan como principales inversiones las partidas para renovación de acerado (50.000 euros), la aportación propia a una inversión en renovación de redes de saneamiento (55.000 euros) o el arreglo de caminos (60.000 euros).
Por ahora, el Ayuntamiento, sin acceso a la financiación externa por la deuda que generó EMUMASA con GICAMAN, no puede afrontar inversiones más potentes como la prevista en la Plaza de España, ya que el Ministerio de Hacienda nos tiene vetado el acceso al préstamo, lamentó Sánchez de Pablo.
Un montante de 1,4 millones de euros que tras el no de la Junta de Comunidades a la dación en pago de los terrenos, el equipo de Gobierno se muestra dispuesto ahora a afrontar. “Nuestra propuesta es pagar, establecer un calendario de pagos”, confirmó el alcalde Leopoldo Sierra. Sin embargo, volvió a recriminar a la Junta de Comunidades que ni siquiera den respuesta a las peticiones de reuniones para afrontar, y resolver, la problemática.
Así las cosas, los presupuestos, “prudentes y realistas” en palabras de Sierra y Sánchez de Pablo, salieron adelante con los votos del PP. Desde la oposición, no se apoyaron estas cuentas ya que el PSOE observaba “falta de ambición para generar más recursos y explotar mejor lo que tenemos sin endeudarnos”, como expuso la concejala Sonia González-Mohíno. Por su parte, VOX pedía que las partidas para “comercio, turismo o empleo” tuvieran una cuantía más elevada y “rebajar el gasto político”.
Fueron los dos asuntos principales de una sesión plenaria que se prolongó desde las 20:00 y hasta las 00:20 horas para afrontar los 14 puntos del orden del día.
