La madre, la hermana y varias tías maternas y paternas de Cecilio Álvarez Osorio, el investigado por el atropello mortal intencionado de su padre, Cecilio Álvarez Parra, hace dos años en Torrenueva, se han posicionado este jueves a su favor. “Mi sobrino es incapaz de matar a una mosca”, ha resumido una de sus tías en el juicio que se sigue contra él en la Audiencia Provincial.
Las cuatro mujeres –la quinta no ha podido declarar por error- han testificado a propuesta de la defensa para respaldar al joven de 32 años al que creen cuando dice que la madrugada del 12 de marzo de 2017 no vio a su padre, que se le echó encima de su coche cuando circulaba para aparcarlo cerca de su casa, y que lo atropelló sin querer.
La madre dice que el padre “era problemático”
“Cuando me llamó diciéndome que había atropellado a su padre no me lo podía creer”, ha explicado la madre. Divorciada del fallecido desde 2006, la magistrada que preside el tribunal del jurado que juzga a Cecilio hijo no ha admitido preguntas sobre su relación. “Era un hombre problemático”, ha dicho de su exmarido; de su hijo afirma que es un muchacho bueno y noble.
“Mi padre lo buscaba para meterse con él”
La hija del fallecido y hermana del acusado ha podido explicarse más. “Mis padres se divorciaron por problemas de malos tratos y nosotros nos pusimos de parte de mi madre”. Pese a eso no se llevaban mal con su progenitor, al menos ella. La relación padre e hijo era más difícil, “mi hermano es débil, se evade de los problemas con el alcohol y las drogas, y mi padre lo buscaba para meterse con él”.
“Me duele por los dos lados”
La testigo ha desacreditado el testimonio del camarero del bar Yess en el que padre e hijo discutieron antes del atropello, “era amigo íntimo de mi padre, tanto él como el dueño del bar”; y le ha pedido justicia al jurado, “a mí me duele por los dos lados, uno era mi padre y el otro es mi hermano”.
No estaban en el pueblo esa noche
A preguntas de la fiscal, que sostiene que Cecilio Álvarez asesinó a su padre, han reconocido que ni ella ni su madre viven en Torrenueva, sino en Jaén, y que la noche del atropello no estaban en el pueblo. Se enteraron porqué el acusado las llamó, pero aun así solo se creyeron lo que había pasado cuando las avisó la Guardia Civil.
La tía materna que limpió la sangre de Cecilio Álvarez Parra después del atropello (cayó malherido en su puerta, en la calle Ranas), también le ha echado un capote al acusado. “Yo vi todo aquello una locura, mi sobrino estaba como loco, decía que su padre se había dado un golpe con el coche”.
“Desde el minuto uno está arrepentido”
Su tía paterna, hermana del fallecido, también ha defendido al acusado: “Desde el minuto uno está arrepentido, cuando lo vi empezó a decirme ‘tita no quería hacerlo, se me ha echado encima’, insistía en eso”.
Tampoco estas dos últimas testigos vieron ni la discusión previa ni el atropello.
El juicio continuará mañana viernes con el informe de los forenses. Cecilio Álvarez Parra, de 55 años, murió un mes después del atropello en el Hospital General de Ciudad Real.