El diputado regional del Partido Socialista, Pablo Camacho, entiende que donde la parlamentaria `popular´, Lola Merino ve “bandazos”, la ciudadanía ve una gestión responsable de la pandemia por parte de las autoridades. Al tratarse de una situación cambiante “lo que debe hacer un Gobierno prudente, como el de Castilla-La Mancha es tomar decisiones en función de la evolución de la crisis sanitaria”, señala.
Explica que afortunadamente ahora la pandemia permite flexibilizar las medidas, por ejemplo en relación a la hostelería, y así ha actuado en consecuencia el Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha, pero dejando claro –añade- que no hay que perder de vista que lo más importante es la salud colectiva, impedir que se incremente la presión asistencial y en consecuencia que haya más fallecidos por el COVID´19.
El otro objetivo, como indica el parlamentario socialista, debe pasar por la vacunación, y se pregunta por qué el Partido Popular lleva días sin referirse a los buenos datos de vacunación en Castilla-La Mancha, porque hoy en la CCAA hay 565.000 dosis administradas, y 166.000 castellano-manchegos ya tienen la pauta completa administrada.
Da la impresión, afirma el socialista, de que las noticias positivas “no les gustan ni a Lola Merino, ni a Paco Núñez, quizá porque la vacunación supone el fin del virus y por tanto al PP de Castilla-La Mancha se le acabará pronto el hacer política miserable y ruin de una pandemia mundial”.
El PSOE no acepta, de ninguna manera, que Merino y el resto de dirigentes del PP pongan de ejemplo a la Comunidad de Madrid en la gestión del virus, recordando que hoy Madrid tiene una incidencia acumulada a 14 días de 406 contagios por cada 100.000 habitantes, justo el doble que Castilla-La Mancha, así como un porcentaje de camas UCI ocupadas del 41%, también el doble que la región.
“Estos datos demuestran que la responsabilidad y el sentido común del Gobierno de García-Page está salvando vidas porque no hay nada más importante que la salud” ha concluido.
