En concreto, ha manifestado en nota de prensa a través de Casimiro Sánchez Calderón, presidente de Honor del Partido Ibérico Íber y exalcalde de Puertollano (1994-2003), que “seguiremos reivindicando la variante Norte, la Autovía y el soterramiento de las vías del tren en Puertollano”.
Manifiesta que las palabras que más se repiten en cualquier lugar al cabo del año son “que vengan empresas que den trabajo”, y señala que “para que vengan empresas hay que reunir todas las condiciones que estas exigen. Una de las más importantes son las vías de comunicación con Europa o con centros de consumo”.
Recuerda que, “a finales de los años 90 del pasado siglo, después de organizar manifestaciones en Castuera, Almadén, Los Pedroches y Puertollano, conseguimos la aprobación de la variante norte de Puertollano y la opción sur de la autovía Ciudad Real- Mérida. El ministro Sr. Cascos se opuso al principio argumentando de que las autovías han de sustituir a las carreteras nacionales, pero en vista de las protestas, tuvo que aceptar la opción sur de la autovía. Luego, el presidente Zapatero se comprometió con la reivindicación e impulsó la autovía Ciudad Real-Puertollano”.
Sánchez asegura que la variante norte de la ciudad para descongestionar el centro y las autovías Puertollano-Mérida y Puertollano-Córdoba “son imprescindibles para que vengan empresas y el Partido Ibérico (íber) las seguirá reivindicando, forman parte de nuestro ADN. También es una necesidad y de justicia comparada el soterramiento de las vías del tren, soterramiento que se viene haciendo sistemáticamente en todos los lugares para no dividir localidades. El soterramiento de las vías del tren a su paso por Puertollano se nos prometió por el presidente de Renfe, Sr. Corsini, en 2002, cuando terminara el soterramiento de Córdoba. Esa reivindicación se olvidó y a Renfe le ha ido muy bien ese olvido. Ese soterramiento es imprescindible para que los barrios de El Carmen y El Pino se unan a la ciudad”.
De este modo, indica que comienzan el año pidiendo estas necesidades “que son vitales para la ciudad, puesto que sin ellas nos quedamos descolgados de todas las redes de comunicaciones importantes de la Península Ibérica”.
