La peregrinación tuvo varias paradas como en la casa natal de San Juan de Ávila, mirador de los molinos-la laguna volcánica y a los pies de las pocitas del prior donde se fueron relatando algunas citas históricas que sucedieron en estos lugares.
Los peregrinos llegaron a las plantas de Nuestra Señora de Gracia después de una ruta de casi ocho kilómetros, sobre las 06.45 horas, tal y como se tenía previsto para posteriormente unirse dicha peregrinación al Rosario de la Aurora.

Al finalizar la peregrinación, cada peregrino recibió un avituallamiento a cargo de la Asociación y con la colaboración de la AECC de Puertollano y la empresa Cofrades de Pasión, a la que la asociación agradece su colaboración.

Ya por la tarde, la Asociación ultimó los últimos detalles para la ya conocida petalá que viene realizando desde 2018.

Pasada las 22 horas, Nuestra Señora de Gracia coronada empezó a pasar por el último tramo de la calle Aduana donde recibió una petalá de más de nueve kilos de pétalos de rosas y claveles, sin duda no de los momentos emotivos de la procesión.
