La junta directiva del Patrimonio Almadén ha emitido un comunicado para “condenar los acontecimientos ocurridos” en el partido que el pasado sábado jugó en el feudo de la UD Carrión, correspondiente a la 23ª jornada del Grupo 1 de Preferente y que se saldó con un triunfo de los de Almadén por 1-2.
Los dirigentes hicieron público “la lamentable situación que vivieron dos de nuestros jugadores” y explicaron que “una vez finalizado el encuentro, un jugador de la U.D. Carrión se dirige en estos términos a nuestro jugador: “Sudaca de mierda, muerto de hambre, ¿cómo vienes a un equipo que va a descender?”, siendo lo citado, omitido por los señores colegiados designados para dirigir el encuentro y que se encontraban a escasos metros de donde sucedieron los hechos”.
También añaden ese comunicado que “a consecuencia de esto, nuestro jugador se acerca visiblemente afectado al contrario para recriminarle lo que había dicho en los términos “hay insultos e insultos”, por lo que fue expulsado por el colegiado, sufriendo así, un doble castigo por unos hechos que no deberían darse nunca en un campo de fútbol”.
También señalan los directivos del Almadén que “durante el transcurso del partido otro de nuestros jugadores de raza negra y de nacionalidad francesa recibe por parte de la grada local insultos racistas como: Negro de mierda”, volviendo a ser omitido por los señores colegiados y sin que tampoco se haya reflejado en el acta al finalizar el encuentro, pese a los intentos que nuestro club ha hecho para que así sea, llegando a hablar con los árbitros designados, que rehusaron poner lo ocurrido”.
Citando la Ley 19/2007, de 11 de julio, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte, que señala que “existe una radical incompatibilidad entre deporte y violencia, cualquier forma de violencia, incluida la verbal o aquella otra más sutil, fundamentada en la trampa, el engaño y el desprecio del juego limpio. […]”, desde el club Patrimonio Almadén se lamentó que “en cualquier deporte, sea la categoría que sea, se permitan los insultos racistas. Condenamos que estos hechos se quieran normalizar y que no se reflejen en un acta que puede servir como denuncia ante la sociedad y ante los estamentos deportivos competentes. No todo vale en el deporte, donde deben primar valores como la deportividad y el respeto al compañero por encima de todo, que es lo que desde nuestro club siempre se ha querido transmitir a cuantos lo componemos”.
Además, los dirigentes solicitan a la Federación de Fútbol de Castilla la Mancha “que se inicie el Protocolo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para los delitos de odio y conductas que vulneran las normas legales sobre discriminación. No hay lugar para el racismo en el fútbol, ni en la sociedad”, concluyen.