Estimados asociados y asociadas:
En primer lugar quiero agradecerle a la Junta Directiva presidida por don Cándido Simarro Rubio la oportunidad que me brinda de dirigirme a vosotros a través de esta carta.
Quisiera daros las gracias por el apoyo incondicional que he recibido durante los siete años en los que he prestado servicio como presidente de nuestra Federación. Como bien sabéis, durante mi presidencia, más el tiempo que FECEVAL estuvo dirigido por una Junta Gestora, han sido los años que con más fuerza ha golpeado la crisis económica a nuestro país, por lo que quizás tanto la Junta Gestora como esta Junta Directiva, que me honré en presidir, lo hemos tenido más difícil, puesto que el empresariado también lo tuvo.
Esta Junta Directiva llegó a FECEVAL con la única misión de cortar la sangría y la desilusión del empresariado, cosa que humildemente creo que hemos conseguido con la ayuda incondicional de todos los empresarios y empresarias. Una vez conseguido ese fin, comenzamos a firmar convenios y realizar actividades, todo ello destinado en beneficio de los asociados. Por todo ello creo que esta Junta Directiva debe estar orgullosa de su trabajo y no bajar la cabeza por nada, ya que su único fin primordial fue siempre velar por los intereses de FECEVAL, cumpliendo a rajatabla con el código ético que anteriores directivas nos dejaron.
Los últimos acontecimientos, que ya son agua pasada, no han beneficiado en nada a la asociación pero después de celebradas las últimas elecciones, se ha visto que el tiempo da y quita razones y pone a cada uno en su sitio. Rezo porque estos hechos queden relegados al pasado y no vuelvan a repetirse nunca en el seno de nuestra asociación.
Mi agradecimiento incondicional a don Cándido Simarro Rubio por haber sido valiente y dar un paso adelante que le ha permitido conformar una Junta Directiva con un gran presente, encabezado por él, y un ilusionante futuro, compuesto por su Junta Directiva, que esperemos sean el futuro de FECEVAL.
Os animo a que apoyéis a don Cándido Simarro Rubio para que pueda llevar a buen puerto todas y cada una de las nuevas ideas y proyectos que aportará a FECEVAL. Nosotros, los asociados, somos parte primordial y debemos dejar a un lado antiguas rencillas y remar juntos para así ser más grandes y más fuertes. No me cansaré de decir que, como en anteriores declaraciones he hecho, en los PRÓXIMOS AÑOS VALDEPEÑAS Y SUS COMARCAS DEBEN DE SER EL MOTOR INDUSTRIAL QUE GENERARÁ RIQUEZA Y PUESTOS DE TRABAJO, labor a la cual estamos llamados todas y todos los empresarios. Por ello mi apoyo a esta Junta Directiva.
Sin nada más que añadir, y reiterando mi más sincero agradecimiento por los años de apoyo y buena relación que me habéis brindado, estoy y estaré a vuestra disposición allá donde me encuentre, os deseo una Feliz Navidad y un Próspero Año Nuevo lleno de éxitos empresariales.
Un fuerte abrazo
Jesús Merlo García
