Este miércoles Ciudad Real ha amanecido “libre” de calles de personalidades o acontecimientos que guardaban estrechos vínculos con el franquismo o la Guerra Civil. El Ayuntamiento de Ciudad Real durante esta semana ha trabajado en instalar las nuevas placas de las nueve calles que se encontraban afectadas por la Ley 52/2007, de 26 de diciembre, comúnmente conocida como Ley de Memoria Histórica.
El pasaje José Gutiérrez Ortega, fundador del diario Lanza de ideología franquista, ha pasado a ser el pasaje de la Pandorga. La calle José María Aparicio Arce, alcalde de Alcázar de San Juan y presidente de la Diputación de Ciudad Real durante los años del franquismo, es ya la calle Manuel Herrera Piña. La plaza Fernando Merry del Val y García Zapata se ha convertido en la plaza de Gloria Fuertes y la calle Gregorio Sánchez-Puerta ha pasado a llamarse Irene Villa.
Las calles Belchite y Brunete han pasado a denominarse Emilia Pardo Bazán y María Zambrano, mientras que Santa María de la Cabeza se llama ahora Sara Montiel. El grupo Vicente Galiana es el grupo Adolfo Suárez, el nombre más votado en por los vecinos, y finalmente, la calle Simancas se le ha instalado la placa de Miguel Ángel Blanco.
Las nuevas placas de las calles, instaladas a lo largo de esta semana, convivirán con las antiguas denominaciones durante un año, tiempo “más que suficiente” para que comerciantes, carteros, vecinos y empresas se adapten a este nuevo cambio, según ha indicado a Lanza, el concejal de Cultura y presidente de la Mesa de Memoria Histórica del Ayuntamiento de Ciudad Real, José Luis Herrera.
El concejal ha recordado que esta medida se aprobó en la Mesa de la Memoria Histórica en septiembre de 2017 y que los nuevos nombres de las calles se eligieron tras un proceso de participación que contó, en primer lugar, con el apoyo de los grupos políticos y, posteriormente, con la opinión de los vecinos a través de un proyecto participativo online.
Los vecinos del pasaje Gutiérrez Ortega se oponen al cambio y el concejal dice que “la ley es la ley”
Por otro lado, ante el contencioso-administrativo presentado por los vecinos del ya antiguo pasaje Gutiérrez Ortega de la capital provincial, denominado a partir de ahora pasaje de la Pandorga, para frenar el cambio de denominación de esta calle por considerarlo un acto “arbitrario”, el concejal ha señalado que “la ley es la ley”.
A este respecto, Herrera ha indicado que Gutiérrez Ortega fue un miembro activo del Movimiento Nacional y que escribió en su día diversos artículos en este periódico “que le vinculaban con la represión franquista y que justificaba la violencia y la persecución hacia las personas que no predicaban con la ideología del régimen de Franco”.
Así mismo, sobre las acusaciones en las que dicen que el cambio costará dinero a los vecinos y comerciantes, Herrera ha dejado claro que es un comentario infundado, pues “no costará ni un solo euro a los vecinos afectados por el nuevo nombre”.
Por último, el concejal ha querido recalcar que “sólo son algunos” los vecinos que se oponen al cambio de denominación. “Ellos dicen que la historia es la historia, pero debemos de cumplir la legislación”, ha aseverado Herrera.