El evento de visibilización del Orgullo LGTBI en Daimiel, organizado por el centro de la mujer en colaboración con la concejalía de Igualdad, se llevó a cabo el miércoles por la tarde en la plaza de España con la presencia de la propia responsable de ambos servicios municipales, Alicia Loro, quien siguió de cerca el acto, presentado por la coordinadora del área, Cristina Sánchez de la Nieta, y cuya lectura del manifiesto anual estuvo a cargo de Fran Martín-Terriza, en representación de este colectivo.
Martín-Terriza inició agradeciendo su presencia y compromiso a la representación de la Corporación, alcalde Leopoldo Sierra y concejales, tanto del PP como del PSOE. “Ante la ausencia de algún representante público municipal que ha declinado la invitación -apostilló – solo decirle que gracias a él o a lo que quiere representar este tipo de actos cada vez tendrán mucho más sentido”, en presumible referencia a Vox, informa el Ayuntamiento en un comunicado.
Para el portavoz LGTBIQ, “la responsabilidad de lo que avance o retroceda una civilización es exclusivamente nuestra, de lo que sale de cada casa, familia, círculo social, colegio, instituto o institución pública.”
Hizo referencia al informe de Trevor Project por el cual “hay un 45% por ciento de jóvenes LGTBIQ menores de 24 años que han considerado seriamente el suicidio como una opción”. Las razones detrás: bullying, burlas, acoso y falta de aceptación de parte de sus padres u otros familiares, según dicho documento.
“No nacemos siendo homófobos, ni racistas, ni intolerantes, ni machistas. Es algo que vamos aprendiendo a lo largo de nuestra vida”, añadió. Concluyó Martín-Terriza pidiendo “desaprender todo esto y normalizar lo que ya debería de ser normal, que todos somos seres humanos, reímos, lloramos, amamos y nos emocionamos, independientemente de donde hayamos nacido, de qué color de piel tengamos, a qué Dios le recemos, cómo nos sintamos o con quién nos acostemos.”
Por su parte, la concejal de Igualdad expresó el propósito desde la administración local «de promover la tolerancia, la igualdad y la no discriminación, independientemente de la orientación sexual de cada persona».
Según Loro, «es fundamental reconocer y defender los derechos de todas las personas sin importar su orientación sexual o identidad de género” y es crucial que todos seamos tratados con «respeto y dignidad». Además, enfatizó que pertenecer al colectivo LGTBI «no es una elección, sino una parte intrínseca de la identidad de cada individuo».
“La felicidad, la plenitud y el bienestar emocional no deberían estar limitados por prejuicios obsoletos. El amor es amor, sin importar a quién va dirigido”, acentúo Loro. Por todo ello, la edil cree firmemente que el colectivo merece «nuestro apoyo y empatía» e hizo un llamamiento para trabajar “juntos” por una sociedad inclusiva y libre de discriminación, basada en el «respeto y la igualdad».
Asimismo, agradeció la colaboración desinteresada en el acto de Carlos Díaz del Campo, profesor de guitarra eléctrica en la Escuela Municipal de Música y Danza que, junto a sus alumnos, cerraron el acto con la actuación de la audición de guitarra eléctrica.
Guitarra eléctrica
Las actuaciones comenzaron con ‘Stairway to Heaven’ de Led Zeppelin, en un concierto con interpretación de guitarra, bajo y batería, que también contó con voz, clarinetes, trombón, tuba, trompeta y piano, y que finalizó con una versión de ‘Welcome to the jungle’ de Guns N’ Roses.
Entre tanto, el Centro de Mujer repartió pulseras con la bandera LGTBI para una conmemoración donde quedó constancia de la iluminación de los edificios públicos y la campaña publicitaria de sensibilización llevada a cabo en la emisora de Radio Daimiel.
