Sin duda, muchas veces… Nuestro cerebro activa inmediatamente un feroz mecanismo de defensa con el que se procura mantenernos a flote en esos momentos y a raíz de esa presión a la que estamos expuestos.
El intervalo de un supuesto estado de bienestar nos puede funcionar durante un período de tiempo corto o limitado, aunque al final ese estado de estrés te hace debilitar tus defensas y tu estado anímico que finalmente… baja.
Toda existencia tiene sus partes grises, aceptarlas nos permitirá avanzar para alcanzar esos momentos tan luminosos que también al ser humano adornan en tiempo presente y seguramente, en el futuro.
El poder de la aceptación es importante siendo la herramienta que nos permite conocer mejor lo que nos sucede, asumiendo la realidades adversas y las emociones difíciles. Todo lo que ocurre, depende del tiempo en el que seamos capaces de asumir que no tenemos el control de todo y todas las cosas que nos suceden en la vida. Aunque el sufrimiento duela y queme, lo que vaya a suceder o sucedió, ya no lo podemos cambiar, pero si transformar en elementos de aprendizaje para nuevas situaciones venideras…
Ese infierno de malestares conforman esa ecuación que casi todo ser humano quisiera evitar para iniciar un nuevo camino dejando al lado tal sufrimiento sin haber superado el conflicto o trauma que pasó por delante de nosotros y quisimos obviarlo de la mejor manera posible.
La vulnerabilidad emocional desarrollada será directamente proporcional a la incapacidad para poder afrontar y olvidar aquello que aconteció y pasaste de puntillas sin mirarla directamente…
Tendrás siempre la sensación de inseguridad al haber dejado de lado algo que seguramente, se pudo resolver en ese momento de tu vida tan delicado.
Pero contra qué estás luchando…?? No te sirve de nada pasar por alto tal problema dado que la lucha ha existido, existe y seguro que existirá cien por cien sin resolver ese pasado del que no hablas nada.
Una auténtica pesadilla que no has afrontado, por lo tanto, es importante que asumas la realidad está ahí sin darle vueltas a nada. Rectifica cuánto antes y relativiza tu situación e incluso reconoce que te has equivocado hasta este momento…
A partir de ahora ya eres consciente de tu error decidiendo por ti exclusivamente!!!
No maquilles tu sufrimiento engañando tus sentidos con situaciones que no te van a ayudar a solucionar lo que te pasa.
Crece poco a poco y cuida tus emociones. La vida merece ser vivida a partir de ahora.
Confía y aborda tus problemas YA!!