La renuncia a sus abogados de tres de los cinco detenidos en la operación ‘Feria’ de la Policía Nacional contra el tráfico de drogas en el barrio de San Antón de Ciudad Real, ha obligado a aplazar el juicio, al menos hasta septiembre.
Los principales acusados, Sergio G.A., su mujer Manuela S.A. y su hijo Sergio G.A., han renunciado a sus defensas in extremis (uno de ellos ayer; el padre no ha ido al juicio por enfermedad, y el hijo y la madre han comunicado este miércoles que tendrán una única defensa), lo que ha motivado la suspensión del juicio, previsto para varios días este mes en la sección primera de la Audiencia. La presidenta les ha advertido de un comportamiento legal (es la primera vez que se aplaza el juicio), pero que parece claramente dilatorio.
La familia, acusada de tráfico de drogas y blanqueo de capitales (el padre y la madre), comparte banquillo con su supuesto proveedor, Eduardo F.R., y la toxicómana J.S.S., que les guardaba la mercancía en su casa a cambio de dinero y droga para autoconsumo.
Los cinco fueron detenidos en mayo de 2021 en la operación ‘Feria’ de la Policía Nacional contra el trapicheo en San Antón. Se trata de la última redada importante en ese barrio considerado uno de los principales mercados de la droga en Ciudad Real.
Relacionados con los últimos incidentes en el barrio de San Antón
La familia G.A. está vinculada a los últimos incidentes en el barrio; Manuela es la mujer herida con una catana el mes pasado, en un conflicto con su cuñado y su sobrino, que ingresaron en prisión preventiva por lesiones. Y además uno de los atacantes de la catana es el hombre que se atrincheró en abril del año pasado en la calle Altagracia, tras otro incidente con disparos (no se encontró el arma).
La policía decomisó en la operación ‘Feria’ 650 gramos de droga (350 de cocaína y 300 de heroína) que la familia guardaba con un blindaje “exagerado”, en un piso que no era suyo para complicar la investigación.
La investigación, que explotó en mayo de 2021, empezó a fraguarse en el año 2019, se paró por la pandemia, y se reactivó después, con muchas vigilancias, intervenciones telefónicas y comprobaciones en el barrio hasta que el 13 de mayo de 2021, sobre las 8.50 horas, en el rellano de la casa del matrimonio, la policía sorprendió al detenido Eduardo F.R., el supuesto proveedor que les traía la droga de Madrid, tratando de entregarles 220, 28 gramos de cocaína con una riqueza en cocaína base del 80,65 %
Blanqueo de capitales con coches e inmuebles
La fiscalía considera en su escrito de conclusiones del caso que el matrimonio y su hijo, incluso cuando era menor, han trapicheado con drogas durante años en el barrio de San Antón y que fruto de ese comercio ilícito obtuvieron importantes cantidades de dinero que lavaron comprando coches e inmuebles.
Ostentación pública de lo que tenían
Se supone que con los beneficios de la droga entre el año 2016 y 2020 compraron varios inmuebles y vehículos que pusieron a nombre de personas de su ámbito familiar más directo. La policía contó sobre esta operación que estrechó el cerco contra ellos porque sin oficio conocido no solo compraban vehículos de alta gama, sino que hacían “ostentación pública, incluso en las redes sociales de lo que poseían”.
Dinero en efectivo, joyas, coches y armas
Además de la droga la policía aprehendió en los registros (en mayo de 2021) 2.475 euros en efectivo, un kilo de joyas valorado en 48.000 euros, dos básculas de precisión, una pistola, relojes de lujo, tres vehículos, once teléfonos móviles y ordenadores de última generación.
Penas entre nueve años y medio y tres años y medio
La fiscalía solicita nueve años de prisión y seis meses por narcotráfico y blanqueo de capitales para el padre, Sergio G.A., ocho para la madre, Manuela A.C. y cuatro años de prisión para el hijo, Sergio G.A.
Eduardo F.A. está acusado de tráfico de drogas y se enfrenta a cuatro años de prisión y Josefa S.S. también está acusada de tráfico de drogas. En el caso de esta mujer concurre la atenuante de drogadicción, por lo que la fiscalía reclama tres años y medio de cárcel para ella. Y para todos abultadas multas en proporción a la droga intervenida.