La Diócesis de Ciudad Real ha presentado en el Salón del Obispado la Jornada de la Infancia Misionera 2024 que se celebrará el domingo 14 de enero bajo el lema ‘Comparto lo que soy’. Damián Díaz Ortiz, delegado de Misiones de la Diócesis ciudarrealeña, ha sido el encargado de desgranar los objetivos y proyectos de la Infancia Misionera en la provincia y en España. Ha estado acompañado de la trabajadora social y misionera en Guatemala, María Jesús Romero, natural de La Solana.
La Obra Pontificia de la Infancia Misionera, con más de 180 años de existencia, impulsa la solidaridad entre niños de todo el mundo y ofrece a padres, catequistas y profesores herramientas para educar en la dimensión misionera y universal.
Durante más de 180 años, la Infancia Misionera ha brindado ayuda a millones de niños sin discriminación de razas, culturas o naciones, abordando sus necesidades fundamentales. El año pasado, se recaudaron 13.446.269,82 € en todo el mundo, con 2.325.225,17 € de España y 81.492,26 € de Ciudad Real.
Estos fondos financiaron 431 proyectos en 44 países, beneficiando a 387.300 niños. La distribución de las ayudas españolas se destinó a construcción y equipamiento (26,3%), formación católica (11,4%), subsidios ordinarios (17,2%), educación (22,3%), y salud y protección de la vida (22,8%).

La Infancia Misionera enseña a los niños a «compartir lo que son» y a desarrollar un «compromiso constante con la misión de anunciar el Evangelio y trabajar por la construcción del Reino de Dios», ha señalado el delegado de Misiones, Damián Díaz. Asimismo, ha señalado que «no se limita a donativos ocasionales», sino que busca «mantener vivos estos sentimientos» durante todo el año mediante materiales y actividades como la revista GESTO, el Oracional para los niños misioneros y el campamento de verano en Navarra.
Además, diversas actividades se llevan a cabo en torno a la jornada, como el Encuentro Diocesano de Infancia Misionera, el Calendario de Adviento, la campaña Sembradores de Estrellas, la Hucha del Compartir, el concurso nacional de dibujo y el Vídeo de la Infancia Misionera.
Este domingo se realizarán actividades en muchos pueblos de Ciudad Real, incluyendo celebraciones de misas, talleres sobre la Infancia Misionera y testimonios de misioneros en centros de enseñanza. El objetivo es fomentar el espíritu misionero, solidario y universal entre los niños, para que se sientan hermanos de todos los niños del mundo y puedan compartir su vida a través de los misioneros.
El testimonio de la misionera María Jesús Romero
María Jesús Romero, trabajadora social y misionera en Guatemala, ha compartido su experiencia, ya que desde «hace siete veranos» va de misionera a Guatemala: «Este verano, después de los años de pandemia y otras circunstancias personales, he vuelto», ha señalado.
En Guatemala, María Jesús colabora con Pedro Jaramillo, quien fuera vicario de la Diócesis de Ciudad Real y que ahora es sacerdote en una zona pobre y violenta en Ciudad de Guatemala, donde lleva en misión casi 20 años. Romero ha comentado que «Jaramillo se ha centrado en el trabajo por los niños y jóvenes para sacarlos de situaciones peligrosas, como las drogas y la violencia, a través de la educación». De ello ha dicho que es «el principal objetivo» de las misiones.
Este pasado verano, centrados en el ámbito social, María Jesús Romero y Pedro Jaramillo han trabajado en talleres para «prevenir la violencia» y han colaborado en un colegio vinculado a la parroquia. Además, han continuado con programas educativos para niños y jóvenes, apoyando a las madres con talleres sobre el trato a los niños y abordando situaciones complejas que enfrentan, según ha relatado Romero.
Romero ha querido señala que el que fuera vicario de la Diócesis de Ciudad Real «también lidera programas para adultos, brindando esperanza y perspectivas a través de la educación». Romero ha destacado impacto tan positivo de este trabajo y ha agradecido la oportunidad de participar cada año, considerándolo «un regalo de Dios».